¿Por qué razón ha quedado desierto el premio de novela?

Cada vez se torna más difícil ganar un concurso literario en el género Novela en República Dominicana. En los últimos años la mayoría ha quedado desierta. Luis R. Santos, escritor y jurado del premio Literario de la Fundación Democracia y Desarrollo (Funglode), habló de la situación a propósito de haber quedado desierta esta categoría en los premios anuales de esta institución, cuyos ganadores se anunciaron recientemente.

“Mucha gente habla de que escribir un cuento es más difícil que una novela, esa es una gran falacia. Son demasiados elementos a tomar en cuenta, la novela tiene muchas aristas, es un edificio que se construye por pisos, que son; el lenguaje, la trama, los personajes, el diálogo, elementos que tienen que estar en coordinación con la historia que se cuenta”, expresa.

Santos sostuvo que la ausencia de un ganador en esta categoría se debe a la falta de calidad de las obras presentadas y explica que para escribir un libro se requiere talento para contar historias, formación, disciplina y sobre todo leer mucho y práctica cotidiana.

“El novelista tiene que practicar mucho, leer a los grandes maestros y no dar por sentado que todo lo que se escribe tiene que ser publicado”, añade Santos.

Asegura que es enemigo de declarar premios desiertos, porque ha sido víctima de eso, dijo que hay ocasiones que los jurados se exceden en exigencias porque quieren obras perfectas, lo cual no existe y destacó que los premios deben incentivar a los nuevos escritores.

Porqué no la premian No obstante, sostuvo que es preferible dejar el premio desierto y no apoyar una obra que podría desacreditar al jurado y a los auspiciadores, porque el lector se da cuenta que no merecía ser publicada y menos premiada.

Considera que a medida que se lee mucho, se escribe, reescribe, corta, pega, corrije y se es cuidadoso en la redacción, el cerebro va afincando el detalle y la técnica de la escritura.

Poca participación y falta de calidad es la causa de que el género novela quede desierto, porque es un trabajo arduo que requiere mucha formación, observó el escritor, reitera Santos.