Exposición
Valentía de puertorriqueños en una muestra
Propuesta. Se trata de una demostración fehaciente de que los jóvenes pintores cuando tienen un objetivo de promover sus obras en el extranjero lo logran con gran éxito.
La exposición: ‘Un Rostro para Borinquén’ del artista plástico Carlos Abad, fue inaugurada recientemente en la Galería de Arte de la Montaña, ubicada en el Centro Comercial Los Paseos en Cupey, Puerto Rico. Está dedicada al desafío que han tenido los puertorriqueños al enfrentar y desafiar los embates atmosféricos del huracán María, que dejó desolada a la hermana Isla de El Encanto.
Tiene la carta de representación creativa de cerca de 25 obras, inspiradas en los estragos del huracán María en territorio borinqueño, y la interpretación del pintor del aspecto paisajístico, urbanístico, arquitectónico y del reflejo que esta tragedia meteorológica dejó en los rostros preocupados de sus habitantes, ante el dolor de las pérdidas humanas, pero también de la pesadilla que representó ver su habitat lleno de escombros.
Carlos Abad, quien viajó a Puerto Rico el año pasado, para participar en la exposición colectiva: ‘Magia del Pincel Dominicano’, narró que tras esa visita, a pocas semanas de su partida hacia República Dominicana, pasó lo inevitable, el paso del destructivo huracán María, causando desolación, ruinas y preocupación en el mundo, por lo que el pintor creó esta muestra, impactado por esta tragedia humana, que también involucra a residentes dominicanos que junto a los nacionales, están luchando por la recuperación física y emocional de los residentes de esa isla amiga del país.
Ante esa motivación, Abad logra plasmar en su obra el mensaje evocador del renacimiento de la isla y sus habitantes: “Cada rostro transmite esa energía, ese renacer, demostrando con los colores, miradas, rostros, gestos y un gran cromatismo que llena de dinamismo y fuerza expresiva”. Son colores frescos que en su lectura nos transmiten una sensación de un mensaje personal que sella el pintor cuando explora con su pincel las huellas de la epidermis de sus piezas.
El artista, quien es gestor cultural del colectivo Artístico, Invasión Cultural de República Dominicana, el que promueve una cultura de paz y en esta ocasión de su exposición ‘Un Rostro para Borinquén’, dijo con sobrada razón, que cada obra de su arte tiene una impronta particular y demoledora para cada espectador, porque plasma a través de sus códigos visuales la noción de triunfo y perseverancia, demostrado en cada pieza de su arte que sí se puede renacer, sin importar los vientos que asolan nuestro territorio.
Carlos Abad en su actual exposición individual se expresa en un lenguaje ecléptico, en el cual adiciona en su obra elementos representativos tales como el expresionismo abstracto y signos y vestigios del surrealismo, con cuya mezcla tiene un sello que puede pulir y ensanchar en sus venideros compromisos visuales.