La falta de información sobre el abuso sexual

Con los tantos abusos sexuales ocurridos recientemente, he escuchado una serie de criterios que demuestran los desconocimientos del tema, culpabilizando la víctima.

El abuso sexual es un contacto físico no consentido realizado sin violencia de manera premeditada con la intención de obtener placer, cuando se trata de una menor se denomina pedofilia que es una conducta sexual patológica, un trastorno de muy mal pronóstico. Si el abuso sexual es cometido por un padre, tío, hermano o padrastro se denomina incesto.

Ninguna niña, ni adolescente, ni mujer desea ser violada, pues es un acto que les produce mucho dolor y vergüenza, jamás pueden formar parte de sus fantasías porque es muy traumática. Decir que la víctima lo provoca por su forma de vestir es revictimizarla porque nada justifica el abuso sexual.

El sentimiento de culpa los introduce en una crisis emocional porque la víctima se dice ‘‘no hice nada para defenderme’’, a veces no le da tiempo hacerlo, actúan muy rápido, y una niña o un niño no puede hacer nada contra el adulto.

En mi experiencia profesional he visto a muchos pacientes en las diferentes etapas de su vida que han sido víctima de abuso emocional y todas presentan un gran sufrimiento y aunque hayan pasado muchos años cuando se conectan con esos sentimientos empiezan a llorar. Este acto es considerado un crimen que daña la personalidad de la víctima, niñas que fueron violadas que de adultas se casan y nunca sienten satisfacción sexual (frigidez y anorgasmia) entre otras razones por haber sido abusadas.

El abuso sexual produce inseguridad, temor, pesadillas, terror nocturno, los niños cambian de conducta, con un comportamiento agresivo, sin apetito, no quieren ir a clases, se les altera el sueño, vómitos, cefaleas, bajan el rendimiento académico, aumento de deserción escolar, conductas de masturbación y que toquen a otros niños en sus genitales son señales claras que deben poner a los padres en alerta.

Las adolescentes se autolesionan con navajas en la cara posterior del antebrazo y la muñeca, se aíslan en su habitación, no la recogen, negándose a su aseo personal, depresión con todos sus síntomas, exceso de masturbación, puede ser la causa del inicio de consumo de sustancias ilícitas, en las mujeres el daño no es menor, lo que sí es recomendable la ayuda profesional inmediata.

Las proyecciones del daño en la personalidad son muy negativas desde cualquier disfunción sexual, conducta sexual promiscua, prostitución, drogadicción, baja autoestima, conductas de infidelidad, cierta tendencia a que vuelva a ocurrir más episodios de violación por el sentimiento de culpa reprimido y la baja autoestima que les produce y el autoconcepto de desvalorización e indefensión y no se saben defender de próximas agresiones sexuales. La educación sexual temprana ayuda a la prevención, dándole información a los niños con palabras claves que usa el agresor.