Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

TURISMO INCLUSIVO. UN GRAN DESAFÍO.

Esperanza de viaje para personas con discapacidad

El derecho a viajar por el mundo rompiendo barreras, que en ocasiones son causadas por una discapacidad física o motora, es como se define a este tipo de turismo.

Acceder a cualquier infraestructura turística de una forma segura es el sueño de algunas personas con discapacidad. Por eso, las naciones que se proyectan turísticamente deben estar dispuestas a recibir este mercado, quienes esperan disfrutar de unas vacaciones sin discriminación, viviendo experiencias que ignoren el grado de invalidez que poseen.

Así, cualquier persona que ande en silla de ruedas podrá ahorrar para conocer un destino caribeño y comprobar por sus propias vivencias lo que su amigo le contó que recorrió.

Las personas con condiciones especiales tienen los mismos planes de viajes que el resto de los turistas: montarse en un avión, ir a un hotel, comer en restaurantes, conocer un museo o un parque histórico, sentir la brisa del mar o mirar un show nocturno.

Debido al auge del turismo en los últimos años, República Dominicana quiere alistarse y ponerse en la fila de esos destinos que reciben diversos visitantes, incluyendo aquellos que suponen un mayor cuidado, pero ¿realmente cuenta el país con las condiciones necesarias para satisfacer las exigencias de turistas con discapacidad?

Turismo accesible nuevo reto para RD Es un mercado virgen en República Dominicana, sin embargo, no deja de ser uno de los temas más discutidos en las últimas ferias turísticas.

Por los beneficios que supondría para el país, el turismo accesible o inclusivo va más allá de las personas con discapacidad, pese a que las autoridades dominicanas sólo se están enfocando en este nicho. El segmento abarca también a los niños, los ancianos y las mujeres embarazadas.

Un estudio de la Organización Mundial del Turismo (OMT) arrojó que, América Latina podría recibir 85 millones de estos turistas, quienes con normalidad serían partícipes de los recursos turísticos.

Para que República Dominicana obtenga un porcentaje significativo de esa población, debe ofrecer facilidades distintivas que supere a otros países de la región.

Este año, el principal escenario turístico de la nación, la ‘Dominican Annual Tourism Exchange’ (DATE), no dejó de lado este tema, pues ya la Asociación de Hoteles y Turismo (Asonahores) quiere que se cree conciencia al respecto, para que República Dominicana pueda venderse como un destino social e inclusivo.

Deyvi García, director de ‘Handicap Travelers DR’, una empresa que se dedica al alquiler y venta de accesorios para la protección de estos turistas, comenta un factor muy importante sobre la accesibilidad, y es que, está no sólo se limita a la parte turística. En su totalidad es un compromiso universal donde tanto las instituciones del sector turístico público como el privado deben ser portadores de soluciones incluyentes.

García cuenta como vio una oportunidad de negocio que a la larga traerá grandes beneficios para el país, puesto que si se quiere lograr que 10 millones de turistas lleguen a República Dominicana en 10 años, no se puede esconder una realidad: las personas con discapacidad también forman parte de esa meta y son seres humanos que sienten y anhelan el don de servicio como se les brinda a otros. Aferrarse a esta filosofía confirmará el buen corazón del dominicano con el extranjero.

Los representantes de aeropuertos, centros culturales, bancos, hoteles, vías públicas, playas u otros deben trabajar unidos para que este nicho crezca cada día más.

El turismo accesible está en auge por diversos factores, según la OMT. Entre ellos se encuentran: las mejoras en la tecnología y los ingresos de las personas con discapacidad, los beneficios de planes sociales, la estabilidad de las pensiones y, por supuesto, el interés por realizar actividades turísticas. Una investigación de la OMT también destaca que las dificultades que imposibilitan el acceso y disfrute de los destinos están relacionadas con:

Páginas web: informaciones incorrectas o desactualizadas.

Agencias de viajes: infraestructuras físicas no adecuadas y falta de información.

Traslado al destino: desniveles bruscos, iluminación insuficiente y medios de transporte no adecuados.

Acceso a las terminales de transporte: vestuarios, zona de espera, falta de baños adaptables e inexistencia de rampas.

Acceso a establecimientos turísticos: entrada al hotel solo por las escaleras, falta de sillas de duchas y alarmas vibrotáctiles para personas sordas.

Señalización: no se ofrece información en formatos accesibles, falta de íconos, ascensores sin relieve y falta de sistemas de alarmas, timbres o audioguías.

Destino: dificultad en el desplazamiento por el entorno urbano y dificultad de acceso a recursos turísticos.

Tags relacionados