Un Buda de doce metros

Con tan sólo dos días y seis camiones de arena, el artista indio Sudarshan Pattnaik ha creado un Buda durmiente de más de 12 metros, al que presenta como el más largo del mundo hecho con este material, para celebrar el Día de Buda de la ONU en Colombo.

Tras tres días de intenso trabajo, uno de ellos de preparativos y los otros dos para esculpir la figura, el reconocido artista desveló su Buda gigante en el recinto donde tendrá lugar la celebración anual de Naciones Unidas entre el viernes y el domingo.

Cercana a la sede del Parlamento de la capital srilanquesa, el área que pronto comenzará a vibrar con actos culturales y conferencias sobre budismo difiere mucho de las playas en las que suele trabajar el artista.

“En Colombo no tienen mucho espacio cerca de la playa, hay mucha piedra allí. Seleccionamos la arena y la trasladamos al lugar” donde se celebrará el festival del Día de Buda o Vesak, indicó el escultor, al destacar que hicieron falta seis camiones llenos hasta arriba.

El resultado es un titánico Buda de ojos cerrados ataviado con una túnica amarilla y recostado sobre un lecho verde, la cabeza descansada sobre una almohada adornada con todo lujo de detalles, también esculpidos en arena.

Pattnaik asegura que su figura de unos 12.2 metros es la más larga del mundo jamás creada con arena, si bien reconoce que el posible récord no ha sido certificado oficialmente.

“No solicité la inscripción en el Libro de los Récords porque tengo muchos récords (...). Cuando hago cosas grandes pienso en que dará la vuelta al mundo y por tanto llegará a mi audiencia y amantes del arte, y ellos lo están aceptando” como récord, explicó el artista.

El indio cuenta con 23 títulos Limca y un récord Guiness, según aseveró.

Cuenta que la idea de hacer el Buda “más largo” se le ocurrió cuando la embajada india en Colombo le propuso participar en el Día de Vesak y agrega que el proyecto va en línea con su afán por adaptar sus creaciones al país anfitrión.

Este es el más largo pero no el único Buda creado por el escultor, que en el pasado construyó otros en China, Alemania o Puri (oeste de la India), unos trabajos que le valieron una invitación del dalái lama para reunirse con él.