KAIRÓS
Seguridad
“Yo soy la puerta: quien entra por mí, se salvará, y podrá entrar y salir, y encontrará pastos”. La seguridad que tiene el creyente de que su vida no la desperdicia en un mundo cada vez más promiscuo, es asumiendo que su seguridad está en su pertenencia a Jesús (el redil) y su acceso a su seguridad espiritual (la puerta). Jesús no explota a sus ovejas, está a su servicio, da su vida por ellas y las conoce a cada una amorosamente.