KAIRÓS
El juzgar a los demás
“El que esté sin pecado, que le tire la primera piedra”. El mayor defecto que puede tener alguien, y con sobrada razón si es uno que se dice ser cristiano, es el juzgar a otros sin ningún asomo de compasión. En casi un cien por ciento erramos a la hora de juzgar las actitudes de los demás. Por regla general, quien actúa como juzgador de actitudes que considera malas en las personas, tiene un fardo más pesado de cargar que el que es juzgado.