CONSULTANDO A LA SEXÓLOGA

Violencia de género

El 8 de marzo de cada año se celebra el Día Internacional de la Mujer, con el que se conmemora la lucha por la igualdad. Sí, porque se hacía urgente buscar igualdad de oportunidades de trabajo, derecho a la no violencia por parte de la pareja e igualdad al acceso a la educación.

En nuestro medio celebramos este día, pero nuestra realidad es que miles de mujeres reportan ser víctimas de diversas formas de violencia, de discriminación, del no reconocimiento a sus derechos, y en fin, hay casos que revelan que no se ha conseguido tal igualdad.

Una de cada 10 mujeres ha sufrido algún ataque sexual, según datos de encuesta (Endesa 2007), la mayoría cometidos por hombres del entorno familiar o de amistades de la víctima o de la misma pareja.

Los maridos matan más a las mujeres que el dengue y la malaria juntos. En ciudades de África y de Oriente 100 millones de niñas son víctimas de mutilación genital, de ablación de clítoris. Esta tortura la hacen en ceremonias públicas. Cuando esto ocurre, la mujer jamás podrá sentir excitación sexual ni mucho menos orgasmo. Penosamente se les niega el derecho a tener una vida sexual satisfactoria. Muchas, incluso padecen de infecciones por la falta de asepsia con la práctica de la extirpación del clítoris.

Lamentablemente, la mujer a estas alturas sigue siendo tratada como objeto por hombres que descargan su rabia con ellas, ya sea maltratándolas o asesinándolas. Las asumen como su propiedad, no como ser igual a ellos.

Es una pena que la violencia de género continúe de manera sistemática y generalizada, y que permee todas las clases sociales; somete aterroriza y culpa a las mujeres, destroza sus vidas y les impide su desarrollo, productivo. Por si fuera poco contribuye a su desequilibrio emocional y baja autoestima, porque las victimiza de forma que aguantan la violencia en silencio, a veces por la falta de protección. La violencia crece. Según la referida encuesta, el 31% de las mujeres separadas, solteras o viudas ha sido víctima de algún tipo de violencia. El hombre violento no responde a un perfil exclusivo. Puede ser violento aunque tenga un alto nivel educativo. Santo Domingo, Santiago, San Cristóbal y Puerto Plata son las cuatro provincias del país donde se reportan más casos de violencia de género. En los primeros 11 meses de 2015 se denunciaron 60,587, según lo indica el Resumen de Denuncias de Género Intrafamiliar y Delitos Sexuales de la Procuraduría General, que también coloca a Santiago como la segunda de más violencia de género. Este es un problema que debe ser enfrentado con más fortaleza legal. La ley 24-97 necesita modificación y más casas de acogida en todo el territorio nacional.

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