La juventud se reúne en Río

Para hoy está prevista la llegada a Brasil del papa Francisco, quien encabezará la Jornada Mundial de la Juventud. El encuentro congregará durante toda esta semana a jóvenes católicos procedentes de diferentes partes del mundo.

Las favelas acogen a peregrinosCasas, parroquias y asociaciones de vecinos de las favelas cariocas ofrecen camas, colchones o cualquier espacio en el que colocar un saco de dormir para recibir a parte de los cientos de miles de peregrinos que acuden a Río de Janeiro para ver al papa Francisco. Las favelas Chapéu Mangueira y Babilonia, dos de las que se alzan en un monte escarpado sobre la playa de Copacabana, son el destino de muchos de los peregrinos que viajaron a Río para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). María Inez Nóbrega, la coordinadora de la iglesia Nuestra Señora del Rosario, ubicada a las puertas de estas favelas, explicó a Efe que hubo un “control riguroso” para seleccionar a los residentes que recibirán a peregrinos. “Si el candidato es un hombre que vive solo y es soltero, no puede hospedar a chicas. Los peregrinos que van a casas cuentan con una carta del obispo de su ciudad natal, es una cosa seria, hay que tener respeto. Para alojar a chicas es preferible que sea una familia”, indicó. A las dificultades normales de una ciudad extraña, las favelas plantean una adicional: sus calles laberínticas, con numeración aleatoria, que obliga a que voluntarios de la iglesia les acompañen a sus alojamientos.

Homilías y discursos previstosEl papa Francisco realizará 17 intervenciones públicas, entre discursos, homilías y saludos, durante su visita a Río de Janeiro y al Santuario Mariano de Aparecida con motivo de la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud católica, que se inicia hoy. En el aeropuerto internacional Galeao/Antonio Carlos Jobim será recibido por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, y desde allí se trasladará al palacio presidencial de Guanabara, en cuyos jardines se desarrollará la ceremonia oficial de bienvenida por parte de Rousseff y donde efectuará su primera intervención de las 17 previstas durante el viaje. Francisco se alojará en la residencia religiosa de Sumaré, de Río de Janeiro, y el día de mañana lo dedicará a descansar. El miércoles Francisco viajará al santuario de Nuestra Señora de Aparecida, distante unos 200 kilómetros al sur de Río de Janeiro. Según lo previsto, el trayecto le tomará una hora. En la basílica del santuario el papa oficiará una misa. Según medios brasileños, alrededor de 5,000 efectivos de diferentes policías y fuerzas militares brasileñas velarán por la seguridad del papa Francisco y de los fieles en ese lugar, el mayor y más visitado santuario mariano en Suramérica. El papa oficiará la ceremonia para un público limitado de 15,000 fieles. El plan inicial de seguridad durante la visita que el pontífice realizará a Río de Janeiro y Aparecida preveía la movilización de 12,000 militares y policías, número ahora elevado a cerca de 14,000.