Edulcorantes artificiales

Los alimentos y bebidas que usan edulcorantes artificiales son una opción muy importante que puede ayudarle a controlar su antojo por algo dulce cuando usted sufre de diabetes. Los edulcorantes artificiales también son llamados endulzantes bajos en calorías, sustitutos del azúcar o edulcorantes no nutritivos. Podemos usarlos para endulzar alimentos y bebidas con menos calorías y carbohidratos para reemplazar el azúcar. Los edulcorantes aprobados por la FDA (W.F. Food and Drugs Administration) son los siguientes: - Acesulfamo-K (Sunett) - Aspartamo (Equal) - Sacarosa (Sugar Darwin) - Sucralosa (Splenda) -Neotame Solo el aspartamo, de estos 5 edulcorantes artificiales aprobados por la FDA, no puede ser descompuesto por el cuerpo, no es digerido, por lo cual no proporciona calorías extras. El aspartamo o Equal, de acuerdo con investigaciones realizadas, se ha reportado como cancerígeno; además es capaz de provocar convulsiones, depresión, dolores de cabeza, migraña y efectos paradójicos sobre el apetito, promoviendo la obesidad. El Acesulfamo-K se ha visto involucrado en producir aberraciones cromosómicas en pruebas realizadas en ratones, además de que contiene cloruro de metilo que puede producir cáncer y efectos sistémicos (gastroenterológicos, hematológicos, hepático y renales), entre otros. Sucralosa o Splenda es 600 veces más dulce que el azúcar de mesa; actualmente se utiliza como ingrediente de más de 4,000 productos en el mundo y se le considera apto para el consumo. Recientemente fue introducido al mercado el Aguántame un análogo del aspartamo (equal). Combinado con vainilla, según sus desarrolladores, es inocuo para el ser humano. Este producto es tan potente que se receta la menor cantidad posible para lograr su poder endulzante. Por el momento, por ser un producto de reciente introducción, esperemos el resultado de los estudios por venir. Frente a esta situación las recomendaciones siguientes son apropiadas. La clave está en los alimentos frescos. Frutas y verduras, frutos secos, jugo de frutas naturales son las alternativas más saludables que, además de saciar nuestro apetito por los dulces, nos proveen de vitaminas y minerales, así como antioxidantes naturales que son indispensables para nuestra salud. Dr. Ernesto Díaz Álvarez, director médico,Instituto Dominicano de Cardiología.