Un nuevo año escolar

Antes de comenzar el año escolar, analice si el costo del centro al cual asistirá su hijo va acorde con sus ingresos económicos, pues algunas dificultades inician con los pagos. Trabaje mano a mano con los profesores asistiendo a reuniones de padres y madres y manteniendo el contacto. Descuidamos supervisar sus libros y cuadernos y cuando las calificaciones bajan es que descubrimos tareas sin hacer. Controlar televisor, celular, juegos, un horario y lugar específico para estudiar es prudente, no se descuide en este sentido. Padres, por cansados que estén conversen con su hijo sobre cómo le va en la escuela, materia preferida, compañero y profesor con quien tiene empatía. La educación inicia en la cuna, por tanto, no deposite sobre los hombros del maestro tu responsabilidad. Papá y mamá, si asisten a entregas de notas y reunión de padres identificarán a tiempo las deficiencias y ausentismo escolar. El seguimiento de los padres ayuda y estimula. Es básico prestar atención a los detalles, disciplina, autoestima y nutrición, sobre todo al desayuno, para un buen desarrollo físico e intelectual. Entre otras cosas, a cada hijo exija en función de su capacidad.