¡Todas a bordo!

A contracorriente de cualquier otra tendencia, el estilo marinero es eterno. Instaurado en el armario femenino desde los felices años 20, regresa todas las temporadas, renovado y aderezado con notas frescas que lo hacen inmortal. La moda marinera siempre ha ofrecido una cierta ambigüedad sexual, ya que las mujeres tuvieron que adoptar un estilo de vestir que era en origen masculino, una realidad que resolvió Coco Chanel, artífice del estilo “navy” femenino. Cuando los rayos del sol sobre la tez eran considerados sinónimo de clase baja, Coco Chanel rompió los cánones y puso de moda la piel bronceada. Acto seguido, la diseñadora tuvo la audacia de crear una línea de ropa inspirándose en el traje de los marineros, que exhibió en persona durante unas vacaciones en la Riviera francesa. Esa colección se componía de pantalones náuticos de talle alto, camisetas de rayas blancas y azul marino con cuello redondo y manga francesa, faldas plisadas, pijamas playeros, impermeables y vestidos de talle bajo. Sin embargo, fue Jean Paul Gaultier el que aupó esta tendencia hasta convertirla en un propio sello de marca, e incluso lanzó su fragancia “Le male” con una campaña publicitaria en que unos musculosos marineros con camisetas sin mangas a rayas servían de reclamo. AlcanceDesde las firmas de lujo hasta las de bajo coste se han rendido al estilo marinero, que esta temporada llega cargado de rayas de distintos tamaños, aunque la verdadera novedad reside en las siluetas ultracortas e interpretadas con bloques de color. Lo más característico de este estilo es el patrón a rayas en blanco y azul marino, pero este año esa dictadura ha desaparecido y el estilo “navy” también se compone con líneas rojas, azules, naranjas, fucsias, negras e incluso doradas y plateadas. En los escaparates del todo el mundo se exhiben vestidos ajustados con rayas blancas y marinas con cuello barco o a la caja, muchos de ellos adornados con un cinturón fino y otros con botones dorados. Jil Sander apuesta por siluetas amplias y largos hasta los tobillos, Max Mara prefiere patrones muy ceñidos e Isabel Marant opta por rayas ultrafinas de cientos de colores. En las colecciones de Diane Von Fusterberg, Prada, CËline, Moschino o Gaultier se encuentra una mezcla de colores imposibles con un resultado final tan atractivo como fascinante. Para el día, los estilistas aconsejan combinar el vestido marinero con la clásica chaqueta “blazer” con botones dorados. ESTILO MARINERO PARA LA NOCHE El “look” marinero sobrevive a la puesta de sol y para ello recurre a los “paillettes” y a los destellos metalizados o así al menos, lo reinventan las firmas Balmain y Balenciaga, que visten a la mujer con minivestidos y chaquetas entalladas de lujo. Esta tendencia, que tanto gusta a la mayoría de las mujeres, por su estilo casual y divertido, tiene la gran ventaja de que se puede rescatar de temporadas anteriores y realzarla con complementos de última generación, como los brazaletes blanco y azul oscuro que propone la firma Hermes.