SABOR Y SABER
Cordon Bleu (“Cinta Azul”)
El turismo produce movimiento de personas de un lugar a otro en todo el mundo. Este ir y venir produce una fusión de la gastronomía entre países y regiones. La pechuga de pollo a la Cordon bleu es un plato que se ha hecho popular en nuestro país, tanto en los restaurantes como en los hogares. Es un filete de pechuga de pollo aplanado, al que se le pone encima una lonja de queso gruyere y dos de jamón cocido, (Se debería doblar el filete en dos, pero aquí se enrolla), luego se empaniza y se fríe. Se hace también con filete de cerdo, ternera y pescado y cada quien le da su toque personal. Hay varias versiones sobre el origen del nombre de este plato, una es que los miembros de la Orden de los Caballeros del Espíritu Santo, en Francia, solían realizar unos banquetes lujosos y extravagantes, llamados Cordon Bleu, además de que usaban la Cruz del Espíritu Santo, colgada de una cinta azul. Otra es, que los cocineros ataban sus delantales con cintas azules, lo que hizo que se relacionara el color azul con la cocina perfecta. A la que doy más crédito, es la que cuenta que la periodista francesa Marthe Distel, utilizó el término Cordon Bleu a finales del siglo IX, cuando sacó en Paris una revista culinaria que llamó “La CuisiniËre Cordon Bleu” (La cocinera Cordon Bleu), y con el fin de incrementar su venta, ofreció a los suscriptores, clases de cocina con chefs profesionales y la promesa de publicar en la revista las recetas impartidas.
