ARTE
La plástica se pasea por Jarabacoa
Consternación, sorpresa y controversia generan en la comunidad artística nacional las declaraciones públicas del reverendo Johnny Durán, donde se encuentra emplazado el mural al fresco “Alegoría de la Virgen del Carmen”, de la autoría del maestro Roberto Flores, cuyas imágenes, según el religioso, tienen miradas gay, mundana y monstruosa, lo que altera, según su apreciación, a sus fieles que han dejado de asistir al templo por esas causas señaladas. Flores es discípulo del genial Jaime Colson, introductor de la pintura moderna. Para enriquecer el debate en torno a este preocupante cuestionamiento a la obra mencionada, recabamos las opiniones de Lourdes Camilo de Cuello, viceministra de Patrimonio Cultural, y el presidente del Colegio Dominicano de Artistas Plásticos (Codap), Antonio Guadalupe, así como los artistas plástico José Rincón Mora, Dionisio Blanco y Juan Bravo. El fresco es la obra pictórica más apreciada del arte universal por la dificultad técnica de su ejecución, que amerita un entrenamiento especializado y condiciones físicas excepcionales, sensibilidad extraordinaria para su concepción y realización de arte público. InvestigaciónLa viceministra de Patrimonio Cultural, Camilo de Cuello, informa que la directora de Museos, Ana María Conde, visitará esta semana al sacerdote Durán, al artista afectado y a voces autorizadas de la comunidad para escuchar de viva voz sus pareceres y opinar con conocimiento de causa ante la propuesta pública del sacerdote Durán de eliminar la obra, que fue inaugurada en 1998, por el obispo de La Vega, monseñor Antonio Camilo, quien aprobó el proyecto mural y elogió en la inauguración de dicha obra. Ponderó Camilo de Cuello que de generarse una avenencia entre las partes afectadas, el mural podrá convertirse en un atractivo. OPINIONES ACERCA DE ESTA OBRA PICTÓRICAEl maestro Antonio Guadalupe, como presidente del CODAP, también integró una comisión de su dirigencia para conocer y mediar entre las partes del debate, que involucra a uno de sus miembros, el fresquita Roberto Flores. José Rincón Mora, quien visitó el mural en 1998 junto a quien escribe, describió el mural como una obra parangonada con las realizadas en el Renacimiento. El también discípulo de Colson, considerado entre los 10 mejores vitralistas del mundo, emplazó vitrales en la Catedral Primada de América, la Catedral (donados por el cardenal de Munich) y en la Iglesia de la Isabela, Primera Ciudad del Nuevo Mundo. Dionisio Blanco llamó a la iglesia a preservar este patrimonio pictórico nacional.