¿Y dónde hay crisis con pleno empleo?

Me preguntaba un amigo ¿por qué hablo de recesión si las económicas están boyantes y en Estados Unidos hay pleno empleo?

A principio del 2007 el desempleo en Estados Unidos era de 4.5%, casi pleno empleo. A raíz de la crisis financiera del 2008-2009 el desempleo alcanzó un 9.7%. Casi tres millones de personas quedaron en las calles en menos de año y medio.

Hubo países donde el desempleo se triplicó. En España, por ejemplo, la tasa de desempleo pasó de 8.5% en el 2006 a 20.4% en el 2009.

La crisis del 2008-2009 muy pocos la previeron y casi nadie creyó que sucedería, incluyendo al gurú de la economía norteamericana y presidente de la FED, Alan Greenspan, que se burló de ella.

Esta tuvo su origen en el problema de las hipotecas subprime de Estados Unidos y se extendió como un virus, afectando a todas las económicas del mundo. Los bancos quebraban días tras días y los salvamentos aumentaron la deuda pública en más de 50%. En Estados Unidos subió de 65% del PIB en el 2006 a 95.7% del PIB en el 2010. Lo mismo pasó en Europa.

En esta ocasión la crisis es previsible porque estamos aún en medio de una pandemia con oleajes sucesivos y de una guerra que está afectando los suministros de materias primas, bienes intermedios, gas y petróleo y el costo de los fletes.

Todo ello está conduciendo a una inflación galopante que en una semana tumbó a dos gobiernos y tuvo a punto de tumbar a otro. Me refiero a Gran Bretaña y Sri Lanka, donde el primero renunció y el segundo fue casi asesinado por las turbas que asaltaron el Palacio de gobierno. En Ecuador, el presidente se salvó por un pelo después de tres semanas de protestas violentas.

La inflación es mucho más mortal que el COVID-19 y para luchar contra ella no funcionan las vacunas. Se requieren políticas monetarias muy fuertes que están elevando rápidamente las tasas de interés y contrayendo las economías.