El gran problema del 2022: la brecha presupuestaria
La pregunta es ¿cuánto costará todo el paquete de asistencia social no presupuestado para amortiguar las alzas de precios en el 2022, a fin de contener la inflación? La inflación acumulada a marzo está en 2.80% aunque bajando cada mes por la congelación de los combustibles.
Partiendo de que la guerra en Ucrania se extenderá todo el año y que el petróleo oscile entre US$100 y US$115 el barril, la brecha presupuestaria rondaría entre RD$60 mil y RD$70 mil millones.
¿Cómo cerrarla? Hay dos formas.
Una muy mala, es aumentando el déficit fiscal de un 3% a un 4% del PIB, equivalente a unos RD$60 mil millones. Eso podría afectar nuestra carrera para mejorar la calificación de riesgo país, vital para reducir el costo del servicio de la deuda mientras las tasas de interés se disparan a nivel mundial.
También es malo aumentar el financiamiento neto del sector público no financiero, que va de la mano con el anterior, y no debe superar el 50% del PIB (47.5% del PIB hasta febrero).
Y peor es bajar el gasto de capital, tradicionalmente pírrico (13.4% del gasto total) en un año donde la inversión privada crecerá menos por las tasas de interés.
Lo bueno es que los ingresos fiscales hasta abril están mostrando un mayor nivel respecto a lo programado (unos RD$20 mil millones), con una tasa de crecimiento hasta marzo de 6.1%. Pero este crecimiento rondará el 5% del PIB en el 2022, mostrando un enfriamiento después de junio.
Otra opción es una nueva amnistía fiscal, similar a la promulgada en la ley 46-20 de Transparencia y Revalorización Patrimonial, que recaudó RD$29,020. Sin embargo, solo 43,990 contribuyentes se acogieron a la ley dejando a miles sin lograrlo. Con esta amnistía podrían ingresar unos RD$20 mil millones adicionales.
La última opción es reducir el gasto corriente en 3% (unos RD$25 mil millones). Medida totalmente factible en un presupuesto programado de RD$905,574 millones. Basta recortar viáticos, viajes, combustibles, energía, nóminas, etc. Es contraproducente pero necesario.
Quedan como opciones extras, si todo se agrava, los adelantos de impuestos o ventas de activos del Estado.
Por lo demás, la estabilidad macroeconómica estaría garantizada por la dinámica que están mostrando las exportaciones, la inversión externa, las zonas francas, el turismo, las remesas, las reservas del BCRD y un estable régimen cambiario.