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Matan de una estocada profesor de idioma de nacionalidad haitiana

En este lugar cayó el cuerpo de Jacques Sosthene Brutus, tras recibir una estocada en la espalda por parte de una mujer que emprendió la huida tras el hecho.

En este lugar cayó el cuerpo de Jacques Sosthene Brutus, tras recibir una estocada en la espalda por parte de una mujer que emprendió la huida tras el hecho.

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Patria Reyes RodríguezSanto Domingo, RD

El profesor de origen haitiano, Jacques Sosthene Brutus, mejor conocido en Katanga, Los Mina, como Chiná, salió a las 6:00 de la mañana a encontrarse con la muerte, pues a unas cuadras de su casa, casi frente al colmado Abreu, recibió una estocada mortal y aunque pidió auxilio nada lo libró de su fatal destino.

Residentes de la calle Carrera G, donde cayó Chiná tras recibir la estocada mortal, dicen que vieron una mujer correr, la que se presume era su pareja sentimental desde hace años, pero aún al mediodía de este domingo, la policía no tenía a ningún detenido por el hecho.

Narran que en principio pensaban que era un atraco, pero que luego vieron a una mujer alejarse del lugar corriendo. Dicen que la mujer era de nacionalidad haitiana y vivía con la víctima.

Faustina Gómez, conocida en el barrio como La Crema, agrega que él cayó muerto casi al instante.

“Chiná” era una persona educada y tranquila, según el testimonio de la dueña de la casa, Eladia Margarita de León (Gladys) donde vivía el hombre desde hacía dos años, en la calle Santa Clara No. 8 del sector Katanga en Los Mina. Daba clases de inglés y francés en el colegio San Vicente de Paul y ofrecía clases individuales de manera presencial y virtual (luego de la pandemia).

Cuenta Gladys que ayer en la noche, la mujer fue a buscarlo a la casa, pero que él no estaba y que su reacción al saber que ella lo andaba buscando fue “ella no tiene por qué ir a la casa, y menos ahora”.

Señala que esta mujer era muy agresiva y que desde hace mucho ella (Gladys) le había prohibido ir a la casa, pues en varias ocasiones la había amenazado con agredirla.

Refiere que en los años que duró viviendo en su casa Chiná nunca tuvo inconvenientes con nadie y que siempre hablaba de que tenía dos hijos en Jimaní, provincia del sur, pero que estos nunca lo visitaron.

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