Enfoque
Falacias sobre el aborto y las tres causales
No son pocas las mentiras que se esgrimen para justificar la despenalización del aborto. Pero en esta ocasión me voy a referir a las declaraciones emitidas por el ex presidente del Colegio Médico Dominicano el Dr. Wilson Roa en relación al debate que hace años se efectúa a nivel del Congreso sobre la despenalización o no del aborto, y donde afirma:
A. Las 3 causales están validadas por la ciencia.
B. Es una vulgar mentira que la vida comienza en la concepción y para llegar a ese momento tienen que haber un óvulo y un espermatozoide vivos.
C. La Iglesia no debe inmiscuirse en asuntos médicos, que se dedique a evangelizar.
No es mi intención establecer polémica y mucho menos con el ex presidente de nuestro gremio, pero estoy de acuerdo con el poeta Pablo Neruda cuando decía: “Porque las cosas no se aclaran nunca/con el olvido ni con el silencio”. Pero la razón de mayor peso para no guardar silencio se debe a que lo que está en juego es la vida, el don más preciado que nos ha otorgado el Creador.
Respeto los criterios que el Dr. Roa defiende, aunque no los comparta. De igual modo espero que él lo haga con los míos; y con los datos que pueda aportar al debate, sirvan para que el pueblo llano que no conoce sobre medicina se edifique, porque es de creer que mi colega los conoce, aunque trate de ignorarlos.
En el debate público sobre el aborto se recurre a un sinnúmero de razones mediante las cuales se le quiere justificar. Como es natural la mayoría de los conciudadanos no siempre comprenden dichas razones llenas de falacias o mentiras que más bien a lo que contribuyen es a confundirlos, y mucho más aún cuando las mismas son vertidas por quienes se supone que conocen a cabalidad el tema como es el caso que nos ocupa, ya que son opiniones de un gineco-obstetra el cual Dios le dotó de talentos y dones para ser médico que debe velar por la vida de dos personas: la de la madre y la del concebido en su vientre.
Veamos qué quiere decir el Dr. Roa cuando expresa que:
A. Las 3 causales están validadas por la Ciencia:
1ª. El Embarazo por Violación no es tan frecuente como se quiere argüir, pues los estudios han demostrado que el mismo representa aproximadamente un 0.6% del total de violaciones, según un estudio realizado en Estados Unidos en 1,290 víctimas. En la ciudad de Minneapolis en 3,500 violaciones no ocurrió ningún embarazo y en Illinois durante 9 años no hubo tampoco ni un caso. Si nos trasladamos a Checoslovaquia donde se realizan 86,000 abortos, solo 22 de ellos fueron fruto de la violación.
¿Por qué no son frecuentes los embarazos como resultado de una violación? Además de hacer ese recuento emocional, Claudio recibe terapia cada dos semanas y considera necesario que la gente hable con alguien sobre lo que sucede en su vida sean “buenos” o “malos” momentos.
“Hay muchas comunidades latinas que piensan que la terapia no es algo que abrazamos o que es necesario”, recalcó.
Para Claudio, ser exitoso significa “sentirse bien emocionalmente y físicamente”, mantenerse en constante comunicación consigo mismo y reconocer sus “fallas”.
Cree fervientemente que cada persona “tiene algo por lo que lo han puesto en el mundo”, ya que vivió por sí mismo la experiencia de haberse “perdido” y encontrar su camino en el mundo profesional y personal.
“Siempre sigue trabajando, siempre sigue mejorando y entendiendo al mismo tiempo que vas a fallar en alguna cosa, pero tienes que entender que va a pasar y hay que aprender de ese momento y saber que habrán mejores”, cuenta entre sonrisas y con una gorra de los Yankees, el equipo más ganador en el beisbol de Grandes Ligas.
Según tres estudios realizados demostraron que, entre el 39% en uno, el 48% el otro y el 54% el tercero las mujeres no esuvieron expuestas al semen del violador. En otra investigación el 51% de los violadores sufrieron disfunción eréctil. Además existen razones obvias que también impiden que la mujer pueda quedar embarazada o por no estar en su periodo de ovulación, por estar esterilizada, ser muy jóven o adulta, estar planificada con anovulatorios, DIU, pesarios, etc. (Aborted Women: Silent No More. David C. Reardon).
Se ha de tener en cuenta que en los EEUU:
a) El 94% que siguió con el embarazo después de una violación, dijo: el aborto no es solución.
b) El 93% que no siguió con el embarazo después de la violación, dijo: el aborto no es la solución.
Esto demuestra que con el aborto no se elimina el trauma de la violación y cuando se invoca un “acto de caridad”, al permitir que una madre que quedó embarazada fruto de la violación para que “no viva traumatizada”, el aborto se le sumaría al trauma ya sufrido, el trauma de haber asesinado a su hijo, provocando con frecuencia el conocido “síndrome post-aborto” que en muchas mujeres se caracteriza por un conjunto de síntomas y signos como culpa, tristeza, enojo, depresión, pesadillas, ideas suicidas, alcoholismo, frigidez, entre muchos otros.
El síndrome toma su nombre del Síndrome Post Vietnam, porque fue en los años de esa terrible guerra cuando se legalizó el aborto en Estados Unidos fruto de una mentira. Pues al igual que los soldados que volvían de Vietnam traían esa guerra en sus entrañas para atormentarles el resto de sus vidas, así las mujeres que abortaban empezaron a sufrir los mismos síntomas que esos soldados. Se ha comprobado que el miedo a este Síndrome está haciendo bajar cada día las cifras del aborto en ese país.
El aborto es lo mejor en el planeta para un abusador porque le ayuda a cubrir y ocultar el abuso de la violación. Y esto es así pues le otorga impunidad al abusador. Y si una mujer es abusada y queda embarazada se intenta solucionar el problema con el aborto, pero el abusador continuará impune, al quedar impune se empodera más, incluso se le quiere responsabilizar a la víctima. ¡Cuánta desfachatez!