La República

Oran todos los días para que su madre supere Covid

Con lista en manos está enfermera lleva noticias de pacientes con Covid a parientes que esperan la información. FUENTE EXTERNA

Rogers EligioSanto Domingo, RD

Los rostros preocupados, cansados y a la vez curio­sos es el panorama que se observa en las afueras del área de internamiento de pacientes con Covid-19 de la Unidad de Cuidados In­tensivos del Hospital Dr. Francisco Moscoso Puello.

En este lugar, alrededor de ocho familias esperaban recibir las informaciones pertinentes sobre la con­dición de salud de sus pa­rientes y el proceso de tra­tamiento que reciben. Ellos esperaban sentados a la in­temperie, a pleno sol en ho­ras de la tarde del pasado sábado.

“Familiares de Célida Reyes”, “familiares de Cé­lida Reyes” es el llamado de alerta que reciben fa­miliares que están cerca y se percatan de que no es su pariente, pero saben que su turno se acerca. El llamado de atención para quienes están alrededor y más lejos y no logran es­cuchar si fue su familiar u otro paciente al que llamó la médico de turno encar­gada del cuidado de los pacientes de Covid-19 de este hospital.

Desde los alrededores vienen tres jóvenes adul­tos que vociferan: “Aquí, aquí, familiares de Céli­da”. Estos son sus hijos, Daniel, Luisa y Gualdo Re­yes, quienes se acercan a la doctora que de manera controlada, cortés y ama­ble les informa sobre la condición de salud de su madre y responde las in­quietudes que tienen so­bre su quebranto de salud.

Tras recibir el infor­me médico sobre la condi­ción de doña Célida, sur­gen preguntas tan comunes y simples, aunque en estos momentos de gran impor­tancia para cada uno de sus hijos, quienes desean saber más de su madre: “¿Cómo está ella?; ¿está comiendo?; ¿respira mejor?; ¿cuál es su ánimo?; ¿está hablando? A mami le gusta hablar mu­cho…”, dijo Luisa, hija de Célida, a la médico quien respondió sus preguntas.

Aunque también le hicie­ron preguntas más detalla­das sobre los niveles de azú­car, hipertensión arterial y riñones de su señora madre, quien presentaba un grave deterioro de su salud antes de infectarse con el Covid-19.

Doña Célida Reyes, de 68 años, es la madre de es­tos tres medios hermanos que velan por ella y su sa­lud, ahora más que nunca, desde hace veinticinco días cuando fue traída desde su residencia en la provincia de San Juan De la Maguana para atenderse en una clí­nica privada de otras com­plicaciones que para nada tenían que ver con el Co­vid-19.

“Ella tenía problemas ya, de hipertensión… pie diabético para cirugía, problemas en los pulmo­nes, había que hacerle diá­lisis en los riñones y con todos sus casos se sumó el Covid”, explicó a Listín Diario, Daniel Reyes, hijo mayor de la señora.

Los hijos de Célida viven en Santo Domingo mientras que ella vivía sola, a cientos de kilómetros en San Juan, y por el deterioro de su sa­lud la trajeron a una clínica del Distrito Nacional donde, supone de su hija Luisa, que se infectó de coronavirus mientras la trataban, puesto que hasta el momento nin­guno de ellos ni sus demás familiares poseen el virus.

INFORMES

Cada día los familiares de pacientes internos por Covid-19 esperan llenos de inquietud las informa­ciones sobre la condición de sus familiares, pues el único contacto que tie­nen con ellos es el doctor o doctora que les rinde los informes de salud por el alto grado de aislamiento que poseen los pacientes con coronavirus.

Este sábado solo cinco pa­cientes además de Célida se encontraban en la Uni­dad de Cuidados Intensi­vos (UCI) de este hospital en condiciones estables, aunque algunos tienen más de treinta días de in­ternamiento. Los que se re­cuperan se les da de alta y en algunos casos los bajan a la sala de emergencia por Covid-19, informó la doc­tora de turno.

Tags relacionados