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Enfoque: Política Internacional

13 tuits polémicos de Trump sin Twitter

Fotomontaje de imágenes del presidente Donald Trump al ser clausurada su cuenta de Twitter, MONTAJE: MONTSERRAT LEMUS CON FOTOGRAFÍA DE GETTY

Fotomontaje de imágenes del presidente Donald Trump al ser clausurada su cuenta de Twitter, MONTAJE: MONTSERRAT LEMUS CON FOTOGRAFÍA DE GETTY

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Almuneda Barragán“Verne”, de ElPaís

Twitter ha sido el ca­nal favorito de Trump para comu­nicar sus decisio­nes, insultar a sus adversarios, despedir a gente de su gabinete y lanzar una retórica incitación al odio que ha desem­bocando en el asalto al Capitolio este miércoles por parte de sus se­guidores y que terminó con cinco personas muertas.

Debido a ello, Twitter ha decidi­do suspender de manera perma­nente la cuenta del presidente, después de que Facebook e Ins­tagram tomaran medidas simila­res. “Tras una revisión de cerca de los tuits recientes de la cuenta @realDonaldTrump y el contexto que los rodea, hemos suspendido permanentemente la cuenta de­bido al riesgo de una mayor inci­tación a la violencia”, ha dicho la compañía en un comunicado. La compañía de Jack Dorsey había optado por etiquetar los mensajes del presidente como “potencial­mente engañosos” después de las elecciones, como parte de las me­didas para prevenir mensajes en­gañosos sobre resultados que vi­nieran de fuentes no oficiales.

Se trata de su cuenta personal y no de la oficial de la presiden­cia, @POTUS, que cuenta con 33 millones de seguidores frente a los 88 de @realDonaldTrump. De hecho, Trump usó esta cuenta oficial de la presidencia para cri­ticar la decisión de Twitter, con una serie de mensajes que la pla­taforma borró posteriormente, según recogen varios medios es­tadounidenses. Twitter también ha suspendido la cuenta de su campaña, @TeamTrump.

Trump ha conseguido marcar agenda desde Twitter todos es­tos años de mandato: ataques a la inmigración, comentarios ra­cistas, el muro con México, me­nosprecio de la pandemia por covid, negacionismo del cambio climático y de manera insistente y sin pruebas, un “fraude electo­ral” en su contra. “Las redes so­ciales han sido un caldo de culti­vo muy importante para conectar a todos estos grupos extremistas que fueron decisivos para que Trump llegara a la presidencia”, dice Rubén Darío Vázquez, espe­cialista en redes sociales y demo­cracia de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Vázquez apunta que Twitter ha sido especialmente importan­te para que Trump se saltara a los medios de comunicación tradi­cionales -a los también atacó con saña a través de la red social- pa­ra hacer que su mensaje llegara hasta sus adeptos de manera di­recta. “Las cuentas de Trump le han servido como un arma políti­ca, como un medio de comunica­ción que penetra en ese Estados Unidos profundo que es el que él representa”, señala Vázquez.

Te traemos una recopilación de algunos de los tuits más polémi­cos que ha escrito Trump en los últimos años:

Fraude electoral

Ha sido el tema recurrente del presidente desde que comenza­ra la campaña electoral. A tra­vés de Twitter y en sus aparicio­nes públicas, Trump ya sembraba la duda hace meses de un “frau­de electoral” que le impediría ser presidente de nuevo. Pese a no tener pruebas y a ser desesti­madas 61 peticiones ante los jue­ces, hasta su último día tuitero siguió inisistiendo en el tema. El día del asalto al Capitolio escribió un tuit dirigido al vicepresidente Mike Pence -que debía reconocer la victoria de Biden- increpándo­le por seguir el protocolo y no ha­cerse eco de sus reclamos de frau­de. Horas después, borró el tuit.

Coronavirus

Aunque la pandemia ya ha mata­do a más de 360.000 personas en Estados Unidos y el propio Trump se infectó de coronavirus, ha sido constante en despreciar la impor­tancia de la enfermedad y referir­se a ella como “el virus chino”.

Despidos por Twitter

Las bajas en el círculo de Trump han sido numerosas, las últimas en el mes de noviembre fueron comunicadas por Twitter, cuan­do decidió echar al Jefe de Ciber­seguridad, Chris Krebs, por afir­mar que las Elecciones de 2020 fueron “las más seguras de la his­toria de EE UU”. Una semana an­tes fue el turno del secretario de Defensa, Mark Esper, quien se negó a sacar al ejército a la calle para reprimir las protestas anti­rracistas de Black Lives Matter.

Black Lives Matter

Fue precisamente este movi­miento antirracista, el más gran­de en la historia del país desde 1968, una gran piedra en el za­pato de Trump. A diferencia de los calificativos cariñosos que tuvo para los asaltantes del Ca­pitolio, el mandatario descalifi­có en junio a los participantes de las protestas contra el racismo y la violencia policial, llamándolos “perros salvajes”.

Impeachment

En 2019, el presidente fue some­tido a un proceso de Impeach­ment del que salió absuelto por su la mayoría republicana del Se­nado. Fue acusado de presionar al gobierno de Ucrania para difa­mar a Joe Biden y aumentar sus posibilidades de ganar las elec­ciones en 2020. Trump tuiteó so­bre el proceso al que se refirió co­mo una “caza de brujas”, incluso llegó a retuitear los comentarios de apoyo del presidente ruso, Vladimir Putin.

Cambio climático

Trump siempre ha sido un ne­gacionista del cambio climático. Una de las primeras decisiones tomadas por su Administración fue salirse del acuerdo climático de París, un pacto histórico des­tinado para proteger al planeta de los impactos de la crisis cli­mática.

México y el muro

México fue el blanco predilecto de los ataques de Trump, inclu­so desde que lanzó su candidatu­ra presidencial antes de las elec­ciones de 2016. El republicano calificó a los mexicanos de “cri­minales” y “violadores” y prome­tió construir un muro en la fron­tera entre ambos países y hacer que sus vecinos pagaran por él. Como presidente condicionó la renovación del tratado de libre comercio a cambio de que el Go­bierno mexicano endureciera sus políticas migratorias e impidiera la llegada de migrantes Centro­americanos a Estados Unidos.

Irán

Irán ha sido uno de los enemigos de Estados Unidos en la política exterior de Trump. En 2018, el presidente llegó a amenazar a su homólogo iraní con violencia.

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