Cruz tuvo un cumpleaños feliz en medio de pandemia

Cruz Milagros Martínez se levantó sobresaltada de su cama al escuchar música y bulla frente a su residencia ubicada en Barrio Nuevo de El Seibo, al ser sorprendida por familiares e íntimos con una agradable y original sorpresa el día de su cum­pleaños.

La idea fue tan original como lo permite el distan­ciamiento y las medidas de protección por el coronavi­rus, que no evitaron las lá­grimas, aplausos, gritos y las reiteradas felicitaciones a la agasajada, así como la promesa de que “cuando esto pase, celebramos me­jor”.

Temprano El alboroto se hizo tem­prano. Una caravana con los vehículos necesarios lle­varon a cabo el agasajo. La sorpresa funcionó a la per­fección. Cruz Milagros Mar­tínez de Mañé, no lo espe­raba. Salió al frente de su vivienda, primero turbada y poco a poco descubrió la sorpresa, visiblemente emo­cionada.

Un trío de mariachis in­terpretaron sus temas fa­voritos, en un ambiente propio de una escena de Ro­meo y Julieta. Los globos y adornos en la marquesina fueron colocados discreta­mente en la madrugada y el montaje no despertó sospe­cha de la festejada.

Por allí desfilaron sus hermanos, cuñadas, sobri­nos y cercanos. La sorpresa fue una “conspiración emo­cional” de su hermana Mer­cedes y Libby, ambas resi­dentes en Miami, a la que se unieron como cómplices sus cuñadas, Annie Ramírez y Miguelina, Rafelina, espo­sas de sus hermanos Mano­lito y Luis, respectivamente, su hija Carolina, y sus sobri­nas, allegados y familiares.

Copartícipes del original agasajo también fueron Nu­rín Ramírez; Luís Mañé y su esposa; su primo Roberto Martínez, quien vino con los Mariachis desde La Romana, sus hijos Arturito Mañé, des­de el extranjero, vía virtual y su hija Carolina y su esposo Rafael Arturo Jacobo, claves en el montaje y organización.

Los vehículos estaban cargados de ramos y de glo­bos multicolores. Las yi­petas, con música de ce­lebración de cumpleaños, también mostraban globos por las puertas y capotas.

ALEGRÍA Dama apreciada. Los gritos de alegría de los mozalbetes, eran testimonio de que Cruz Milagros se ha ganado su espacio en el corazón de los suyos, por su trato y forma de ser. “Ella es un ser especial, le dedicamos esta sorpresa, para reiterarle, cómo la queremos aún en estos momentos de Covid-19”, dijo uno de sus familiares.