Atención a la salud mental

Debemos al sacerdote Francisco Xavier Billini la fundación (1889) del primer Sanatorio para Enfermos Mentales, en las Ruinas de San Francisco (Ciudad Colonial) y luego, en 1940, trasladado a la vecina comunidad de Nigua (San Cristóbal), donde funcionó hasta el año 1959, cuando es trasladado a un nuevo edificio, bautizado como Hospital Psiquiátrico Padre Billini.

La triste historia de este almacén de enfermos nos la cuenta el Dr. Antonio Zaglul, en el libro “Mis 500 Locos”. A pesar de las dificultades hemos logrado avances, entre los cuales debemos mencionar la fundación de la Sociedad Dominicana de Psiquiatría (1968); la celebración del Primer Congreso Dominicano de Psiquiatría (1975) y, de manera especial, la creación del Departamento de Psiquiatría e Higiene Mental (1972), bajo la responsabilidad de los psiquiatras Máximo Beras Goico, director y Rafael García Álvarez, subdirector, siendo el Secretario de Estado de Salud Pública el Dr. Héctor Pereyra Ariza, primer y único psiquiatra que ha ocupado esa posición. Gracias al empeño de estos colegas se logró la apertura de servicios de psiquiatría en los hospitales generales de las principales ciudades del país, así como la creación de la Residencia de Psiquiatría, que inició el 1 de octubre del año 1977. Este acontecimiento histórico constituye, sin ninguna duda, la división entre el antes y el después de la psiquiatría dominicana. En estos 42 años se han formado en el país 214 psiquiatras.

El Departamento de Salud Mental, del Ministerio de Salud Pública, en el mes de abril de 2015, asumió una política basada en cinco grandes proyectos:

1.- Cierre y transformación del Hospital Psiquiátrico Padre Billini. En 1972, cuando comenzamos a laborar en el Hospital Psiquiátrico Padre Billini, mejor conocido como el manicomio o el 28, los pacientes eran alrededor de mil, en las peores condiciones imaginables. Hoy, el antiguo manicomio es el “Centro de Rehabilitación Psicosocial Padre Billini”. Tiene ochenta usuarios viviendo en condiciones propias de la dignidad que amerita un ser humano. Reciben un entrenamiento de siete días a la semana para la rehabilitación psicosocial y para la reinserción familiar y laboral. A partir del mes de agosto de 2016, la República Dominicana se convirtió en “territorio libre de manicomio” lo cual es una referencia en América Latina, donde la gran mayoría de los países no ha cumplido esta meta, adoptada por todos, en 1990, mediante la Declaración de Caracas.

2.- Apertura de las Unidades de Intervención en crisis, para el internamiento de pacientes en Hospitales Generales.

3.- Habilitación de los Centros de Salud Mental Comunitarios para la atención y seguimiento de las personas en el área geográfica correspondiente.

4.- Funcionamiento del primer nivel de atención en salud mental, a través de la aplicación del mh/GAP: una estrategia auspiciada por la OPS con el objetivo de mejorar la atención de los trastornos mentales, neurológicos y por uso de sustancias.

5.- Espacios adecuados que faciliten la rehabilitación psicosocial e inserción laboral, tales como los Centros de Rehabilitación Psicosocial, las Viviendas Tuteladas y los Hogares de Paso, algunos de los cuales ya están en funcionamiento. Es oportuno expresar que hace pocos días, mediante el decreto 120-19 el presidente de la República creó el “Centro de Rehabilitación Psicosocial y Desarrollo Humano” (RESIDE) con el objetivo de rehabilitar ciudadanos con discapacidad mental y promover su inclusión social.

Otro acontecimiento trascendental para la salud mental en nuestro país es la construcción de una Ciudad Sanitaria en los terrenos que ocupó el Hospital Dr. Luis E. Aybar, cuya inauguración está pautada para este año. En esta nueva Ciudad Sanitaria, la salud mental tendrá un área para la consulta e internamiento de pacientes, así como para la Residencia de Psiquiatría. Esta decisión será de gran impacto para la salud mental de cuatrocientos mil familias de la parte Este del Distrito Nacional.

De manera especial, debemos destacar la creación de la Residencia de Psiquiatría Infantil, una vieja aspiración de los profesionales de la salud mental que ya tiene tres años funcionando en el Hospital de Niños Dr. Robert Read Cabral.

Junto a los avances mencionados, están previstos los siguientes aspectos:

- Apertura de doce Centros de Salud Mental en la Comunidad en la ciudad de Santo Domingo y de uno en Santiago. Estos Centros constituyen el eje central de la salud mental, pues ellos brindan atención ambulatoria con apoyo psicofarmacológico y psicosocial en un área poblacional definida de miles de familias. También estos Centros ofrecen las funciones de Hospital de Día, Rehabilitación Psicosocial y Visitas Domiciliarias.

- Ampliar la capacidad de las Unidades de Intervención en Crisis, aumentando el número de estas Unidades en los Hospitales Generales.

- La formación en Atención Primaria en Salud Mental, así como en Salud Mental Comunitaria, en las modalidades de Diplomado y Maestría.

En esta labor participan, además, la Sociedad Dominicana de Psiquiatría, el Colegio Dominicano de Psicólogos y otras instituciones públicas y privadas, con el apoyo permanente de la Oficina Panamericana de la Salud. Se trata sin duda de un esfuerzo colectivo que merece el reconocimiento de la sociedad dominicana.

Recientemente nos visitó el Dr. Benedetto Sarraceno, quien fuera Director General de Salud Mental de la OMS y considerado como una autoridad mundial en este campo. En su Informe oficial expresa: “Los avances de la reforma del sistema público de salud mental en la República Dominicana representan un caso único en las regiones de Centroamérica y del Caribe. En pocos años se han logrado tres grandes objetivos que reflejan las indicaciones y recomendaciones de la OMS/OPS:

- la transformación radical del hospital psiquiátrico;

- el establecimiento de camas para casos agudos en Unidades de intervención en crisis en hospitales generales;

- la intensa actividad para capacitación de los profesionales de los centros de Atención Primaria a través de los módulos mhGAP.”

“Estos tres importantes logros -enfatiza el Dr. Sarraceno- permiten considerar la experiencia de reforma del sector salud mental en la República Dominicana como un modelo de referencia para la región de las Américas”.