Aumenta a cuatro los muertos por explosión

Falleció ayer otro de los pacientes internos por las quemaduras sufridas tras la explosión del pasado lunes en la comunidad Nuevo Horizonte de Santo Domingo Oeste, donde opera una empresa comercializadora de combustibles.

La información la dio a conocer el director de Cuidados Intensivos de la Unidad de Quemados del Hospital Ney Arias Lora, Eddy Bruno.

Explicó que se trata de un hombre de 36 años de edad, quien falleció de un shock hipovolémico con un fallo multiorgánico.

El doctor Bruno explicó que el recién fallecido también presentaba quemaduras profundas de segundo y tercer grado, en el 95% de su superficie corporal.

Explicó que quedan otros dos pacientes en sala de Cuidados Intensivos en estado crítico, con lesiones profundas y bajo ventilación mecánica.

Tenían miedo Vecinos del lugar manifestaron que las operaciones de la empresa causaba malestares a todos, pues el barrio completo se cubría de un humo hediondo que les impedía respirar.

El señor Juan Ramón Soto explicó que debido a esos inconvenientes, numerosos pobladores, niños y adultos, padecen problemas respiratorios.

“Nosotros fuimos muchas veces a Medio Ambiente para que clausuraran este lugar, pero no valieron nuestras acciones, y mira cómo terminó todo”, dijo.

De hecho, la señora Liliana Montaño, quien habita al lado de la recicladora de combustibles, dijo que sus problemas respiratorios y los de sus hijos son ocasionados por las operaciones del negocio. Se quejó, además, de que a pesar de los daños que causó la explosión a su casa y a la de una pareja de esposos que tenían un cuarto rentado, ninguno de los dueños se les ha acercado para pagarles los destrozos.Mostró a los reporteros de LISTÍN DIARIO que todo lo que su inquilina tenía fue consumido por las llamas.

“Mi vecina María y su esposo, solo quedaron con la ropa que tenían puestas. Ellos se salvaron por pura chepa, porque a esa hora que ocurrió la explosión, ellos no se encontraban en casa y esa era la hora que ellos precisamente tomaban para descansar”, agregó.

De igual forma, mostró que el fuego alcanzó la habitación de sus hijos y les dañó sus útiles escolares, la cama donde ellos duermen, su ropa y zapatos, por lo que espera que los dueños de la empresa recicladora de combustibles respondan por los daños. Otros vecinos entrevistados manifestaron su deseo de que la empresa sea trasladada del lugar, porque constituye un peligro para los pobladores de Nuevo Horizonte, tanto por el humo que despide de lunes a viernes como por la quema, así como ante la posibilidad de que vuelva a estallar.

Nuevo Horizonte es una comunidad con características semi urbana, que colinda con el municipio Los Alcarrizos, pero según los lugareños, llegaron primero que la empresa.

“Nosotros no estamos dispuestos a seguir soportando los daños que nos causa la empresa y por eso vamos a mantener la lucha hasta que las autoridades los obliguen a buscar un espacio donde sus operaciones no impliquen peligro para la vida”, dijo Juan Ramón Soto. Según contaron los pobladores de la citada comunidad, “aquella fábrica no es más que un centro clandestino de venta de combustibles que funciona de manera ilícita dentro de un residencial apartado.