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EMBARAZO PRECOZ

Escuelas del sur con los Índices más altos de menores embarazadas

Apoyo. Siete alumnas embarazadas, de un grupo de 20 de una escuela en Baní, reciben orientaciones por parte de un equipo de psicólogos educativos.

Apoyo. Siete alumnas embarazadas, de un grupo de 20 de una escuela en Baní, reciben orientaciones por parte de un equipo de psicólogos educativos.

Antes de finalizar el año escolar 2017-2018, el sistema educativo público habrá registrado casi dos mil adolescentes convertidas en madres mientras cursaban la secundaria.

En 100 de los 105 distritos educativos a nivel nacional hay 1,835 estudiantes embarazadas o que han dado a luz recientemente, estando la mayoría de los casos en las escuelas de la región Sur.

Estudiar en escuelas públicas incrementa siete veces la probabilidad de quedar embarazada, según una investigación sobre el embarazo en adolescente del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

La justificación recae en que 96% de las jóvenes encuestadas en las zonas con mayores casos de embarazo precoz (Sur y Cibao central), estaban matriculadas en escuelas públicas, mientras que solo el 3% en centros privados.

Solo en un centro educativo en Baní, perteneciente al distrito 03-04 de la regional de Azua, hay 20 alumnas de secundaria embarazadas entre los 15 y 18 años de edad.

Este año es menor el número de estudiantes convertidas en madres a destiempo, según su director (omitimos el nombre de la escuela por la integridad de las adolescentes), en años anteriores han llegado a 35 y 40 las menores embarazadas, estando en la tanda matutina 22 de ellas.

Todas están dentro de un programa permanente de orientación y educación dentro de la escuela, integrado por dos psicólogos y dos orientadores educativos.

En ese distrito educativo en Baní, de acuerdo con los informes de Educación, hay 52 estudiantes camino a ser madres, cifra superada por el 03-01 de la provincia Azua, con 162 menores embarazadas.

Reducir deserción En tres meses se estará implementando en las escuelas públicas un programa de prevención y atención a estudiantes embarazadas, buscando que menos adolescentes abandonen los estudios por esa causa.

Según el Fondo de las Naciones Unidas para la infancia (Unicef), 26% de las adolescentes se van de la escuela por el embarazo, situación en que el Ministerio de Educación asegura que trabaja para reducir ese porcentaje.

Minerva Pérez, directora general del Departamento de Orientación y Psicología del ministerio, dijo que para lograrlo se realizan “acciones puntuales” en los centros educativos, pero en casos de expulsión o discriminación, las Normas del Sistema Educativo Dominicano para la Convivencia Armoniosa, que prohíbe esta acción, no contempla ninguna sanción.

Si se denuncia, el Ministerio aplica amonestaciones al personal.

El programa incluye guías y estrategias para el abordaje de la educación sexual, que es la forma más sistemática de prevenirlo.

Pese a ello, el Programa de Educación Efectivo Sexual (PEAS) solo llega al 32% de la población estudiantil, porcentaje que se determinó en 2015 y que continúa igual tres años después.

Pérez dijo que están en proceso de diseño las jornadas de capacitación del personal docente para que el abordaje de la educación sexual sea más sistemático, tomando en cuenta el enfoque y contenidos curriculares, así como las necesidades de los estudiantes, según edad y contexto social.

El plan estratégico incluye tambien los protocolos de atención para el apoyo psicopedagógico y psicosocial de los estudiantes, tanto para la madre como el progenitor, si es adolescente e igualmente alumno, para que puedan terminar la secundaria.

Además, establece coordinación con otras instituciones gubernamentales para mantener los programas de prevención de embarazo y la educación sexual, especialmente en las provincias con mayores tasas.

EDUCACIÓN SEXUAL Para hacer más eficaces las políticas y medidas dentro del sistema educativo para prevenir el embarazo adolescente, se necesita establecer sinergias más firmes con el Unicef en la implementación del Programa de Educación Afectivo Sexual (PEAS), que comenzó a ejecutarse en el nivel medio en 1996. Así lo considera el presidente de Acción Empresarial por la Educación (EDUCA), José Mármol, quien propone que para procurar un desarrollo saludable en los niños y adolescentes, se debe iniciar con la educación inicial. “Sería la mejor prevención para reducir embarazos tempranos y paliar la deserción escolar en adolescentes”.

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