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CARTA PASTORAL

“Que la justicia y la paz se encuentren”

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f) En el irrespeto a la independencia de los Poderes del Estado. 45. Es preocupante la situación de la independencia de los Poderes del Estado, un signo más del déficit de institucionalidad del Estado dominicano en general. La población percibe que todos los poderes del Estado están sujetos a unos cuantos líderes y a un solo partido. Además, cada cuota de poder institucional es utilizada para agendas políticas e ideológicas, en detrimento del reconocimiento automático de los derechos fundamentales. 46. Este modo de accionar se puso de manifiesto de manera preocupante en el proceso de aprobación de la nueva ley del Código Penal, en el mes de diciembre de 2014. El punto nos preocupa no sólo por la manera superficial en que se salió del paso de la problemática del aborto; nuestra posición moral es bien conocida al respecto. Nos preocupa también desde el punto de vista de la paz colectiva el hecho de que la pieza fuera aprobada de manera irregular en la Cámara de Diputados creando mucha desconfianza y desprestigio del Poder Legislativo. La irregularidad acarreó como consecuencia que dicha ley haya sido recurrida en el Tribunal Constitucional, minando aún más la autoridad moral de nuestros legisladores. g) En el creciente endeudamiento. 47. Por falta de controles o por imposición en las cámaras, el Poder Ejecutivo ha podido endeudarse a niveles insostenibles. Cerca del 30% del presupuesto nacional está comprometido para el pago de la deuda externa. Esto tiene como consecuencia una rigidez excesiva en el gasto, en detrimento de la calidad de la inversión en la vida de la gente. Al parecer, la lógica del endeudamiento excesivo responde también a la necesidad de aceitar una maquinaria política cada vez más demandante de recursos para lograr la conquista del control estatal. Es a esta maquinaria a la que puede acudir el ciudadano de a pie para enfrentar muchos de los problemas que impactan negativamente su vida. h) En la insuficiente aplicación de una política de inmigración equilibrada. 48. Crea tensión entre nosotros la problemática de la inmigración que requiere una posición racional y justa para su solución. La población inmigrante es quizá la más vulnerable en todos los rincones del mundo globalizado. Ante la situación creada por la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional, el Poder Ejecutivo se esforzó en buscar una doble salida: la Ley 169-14 para los hijos de padres inmigrantes en situación irregular y el decreto 327-13 para los inmigrantes en situación de irregularidad. Sin embargo, estas medidas excepcionales del Poder Ejecutivo, en el orden práctico de su ejecución, son obstaculizadas por múltiples sectores involucrados. En el caso de los nacionales haitianos, la situación se complica, porque las autoridades de Haití o no los documentan o lo hacen deficientemente. Además, sus contratistas locales, públicos y privados, normalmente no desean proveerlos de documentación que atestigüe sus vínculos laborales y con la cual puedan demostrar su arraigo en el territorio nacional. i) En el auge del narcotráfico y el consumo de las drogas. 49. Un especial obstáculo que va contra la paz de la familia dominicana lo constituye el tráfico de drogas. Los responsables de la familia no saben a quién acudir para ayudar a sus hijos o a sus vecinos cuando estos se ven atrapados en las redes del narco, porque asisten cotidianamente al triste espectáculo noticioso en el que se informa regularmente cómo miembros del aparato del orden público participan activamente de dicho tráfico. 50. Para muchos jóvenes pobres, el microtráfico representa el único mecanismo de movilidad social y una estrategia más prometedora para salir del desempleo. Estos jóvenes de los sectores populares no cuentan aún con un sistema educativo de calidad que les prepare para insertarse en el mercado de trabajo y que les ayude a cultivar las dimensiones espirituales de la existencia humana. 51. Por el contrario, asisten cotidianamente a las aulas de los medios de comunicación en las que se les bombardea con un modelo de vida consumista. El consumo propiciado por la globalización capitalista parece constituir para las nuevas generaciones la única fuente que les permite construir una identidad personal digna y socialmente reconocida. j) En los juegos de azar y en el exceso de bebidas alcohólicas. 52. Y qué decir del auge de los juegos de azar y de las bebidas alcohólicas. Tenemos en toda la geografía nacional más bancas de apuesta que escuelas, un promedio de tres bancas por cada centro de educación. En el país hay un total 13,353 centros educativos, entre escuelas públicas y privadas; mientras que entre bancas de lotería, de lotos y deportivas se estima un total de 38,271. Nuestra gente humilde vive el sueño de sacarse el premio para hacerse rico y caen en la trampa de la adicción a los juegos de azar, mandando al vacío el poco ingreso que percibe, mientras su familia vive grandes calamidades. 53. El otro aspecto negativo que merma la moralidad de nuestra gente es el consumo excesivo de alcohol. Hay un constante crecimiento de centros de bebidas alcohólicas en todo el país. Da mucha pena ver cómo, los fines de semana, se llenan exorbitantemente estos lugares de diversión donde muchos de nuestros obreros suelen ir a dejar los pocos ingresos semanales, dejando muchas veces a la familia sin el sustento de cada día. k) En la irresponsabilidad y deficiencia de nuestros cuerpos de seguridad. 54. La inseguridad no se experimenta solamente en el ámbito del tráfico de drogas que ha contaminado a las instituciones responsables de combatirlo. La policía es percibida por la población más como una amenaza que como una aliada. En nuestro mensaje de febrero de 2012 denunciábamos el deterioro de la institución policial y queremos repetir aquellas palabras porque aún siguen teniendo actualidad: “Se hace urgente la renovación de nuestros organismos de seguridad, lo que implica que el gobierno mejore significativamente los salarios de los miembros de la Policía Nacional y de los demás cuerpos armados, así como dotarlos de los instrumentos y recursos requeridos para que puedan dar una respuesta a tiempo en lo que tiene que ver con la protección de la ciudadanía. Ante la creciente ola de violencia y el auge de la delincuencia, muchas veces da la sensación de que estamos huérfanos de autoridad”13. l) En la impunidad, fruto de una deficiente aplicación de la justicia 55. Se hacen grandes esfuerzos por adecentar el aspecto institucional del poder judicial. Pero todavía hay mucha impunidad cuando se tratan casos en los que están envueltos políticos, militares, narcotraficantes y gente de dinero. Lo mismo cuando se trata de atracadores, rateros y ladrones, que en su mayoría actúan en contubernio con autoridades policiales o con políticos. 56. Al aumento de la sensación de inseguridad colaboran los casos escandalosos de fraudes públicos y privados que quedan impunes en la justicia. En el mismo orden, podemos señalar los casos conflictivos más ligados a la vida cotidiana, como los son la violencia contra la mujer, en los que se tiene la impresión de no contar con un ministerio público capaz y competente. Como botón de muestra, se puede señalar la insignificante cantidad de médicos legistas y forenses a escala nacional. m) En la degeneración del ambiente intrafamiliar. 57. No es de extrañar que ante este cuadro como el que acabamos de describir, se haya incrementado la violencia intrafamiliar. Preocupan de manera especial los frecuentes y vergonzantes casos de feminicidio. Los hombres se sienten cada vez más inseguros en su masculinidad en la medida en que ven a las mujeres emancipándose y exigiendo un trato igualitario. Esto se expresa, por ejemplo, en la generación de ingresos para el hogar, afectando la imagen del “hombre proveedor”. Lo triste es que en muchas manifestaciones de la cultura dominicana se sigue legitimando esa violencia del hombre contra la mujer. La mujer no parece contar aún, en territorio dominicano, con un sistema público al cual acudir confiadamente para enfrentar el abuso de los hombres. n) En la violencia contra el niño en el vientre de su madre. 58. Con profundo dolor y decepción hemos asistido al intento de introducir la despenalización generalizada del aborto en el Código Penal, bajo el eufemismo de interrupción del embarazo en el caso de violación, incesto y malformaciones del feto incompatibles con la vida. Como resultado se aprobó un texto confuso que deja el tratamiento del problema a una futura ley especial. Entendemos que si se llega a elaborar, esta ley será también inconstitucional. 59. Nos conforta que la Fundación Matrimonio Feliz y otras instituciones hayan recurrido al Tribunal Constitucional para que se declare inconstitucional aquellos artículos del Código Penal Dominicano que apoyan o dejan abierta la posibilidad del aborto. Reiteramos, en nombre de la justicia y la paz, nuestro pleno apoyo a esta defensa de la vida. III. Propuestas para que la justicia y la paz se hagan realidad.60. Invitamos a nuestros economistas y a los grandes promotores de nuestras políticas macroeconómicas a pensar y promover un dinamismo económico que mejore el bienestar del conjunto de la población, de modo que el Estado pueda invertir en elementos básicos para una vida de calidad, como la salud pública, la educación, la vivienda digna para los pobres, la seguridad ciudadana, el sistema de justicia, la construcción de caminos vecinales que comuniquen las comunidades rurales, la iluminación de calles, avenidas y carreteras, así como el mantenimiento de obras públicas claves.

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