DESDE LA ÚLTIMA BUTACA
“This charming girl”
Lee Yoon-ki no oculta su preferencia por el cine de autor. “The charming girl” es un ejemplo de complicidad. Tiene episodios en clave sobre una joven coreana de hoy, refugiada en sí misma como respuesta a un sentimiento de introspección.
Un trágico episodio de su infancia que la película no muestra hasta sus minutos finales, justifica su personalidad.
La actriz Ji-Soo Kim se mete en la piel de este personaje lleno de dudas, con necesidad de dar amor a los demás. Ella hizo suyos los dictados de un guión complejo, y aprendió a moverse como mariposa insatisfecha. Lo hizo dentro de su hogar, en la oficina, almuerzos y cenas; en sus relaciones interpersonales, en las tiendas, supermercados; en sus caminatas y búsquedas. Esta joven no abandona su encanto, ni su fe. A veces asume la vida sin rigor, pero en otras se esfuerza en buscar su afecto oculto.
Este trabajo unipersonal se apoya en los movimientos de una cámara indiscreta y elegante. La música, suave, y precursora aparece y desaparece como un afluente encantado para dar paso a una banda sonora esencial.
Lee Yoon-ki sabe trabajar con poco presupuesto. Sus escenarios no se inventan, son los que vemos todos los días; los personajes visten como nosotros, comen nuestros platos favoritos, compran en espacios colectivos, y sueñan con realidades y proyectos cercanos.
“This charming girl” se mueve entre la sutileza y el devaneo. Es una obra alegórica donde la imaginación es mucho más coherente que la vida y donde el tiempo narrativo no oculta nostalgias, evocaciones y deseos insatisfechos. Cada escena es un nuevo reto para la seguridad emocional del espectador. La tesis de que en la vida es más importante controlar los sentimientos que tenerlos es lo que mueve la expectativa de esta joven con una gran esperanza, pero siempre dejando a cada quien la facultad de poner el punto final.
Como cine de autor “This charming girl” no busca taquilla. Solo pretende calidad, no cantidad. Es, además, otro aporte de la cinematografía coreana a una narrativa visual muy cercada a los conflictos del entramado existencial, y una mirada crítica a la urgencia del presente que a veces impide descubrir los rayos.