FÁBULAS EN ALTA VOZ
La necesidad de rescatar el respeto
La situación por la que todos atravesamos se debe en gran medida al irrespeto mostrado por una población subversiva que desafía la autoridad y pone en peligro su vida y la de los demás. Hoy más que nunca decidí hacer un viaje a una ciudad fabulosa donde sin caer en el autoritarismo, se cumplen las leyes y se acatan las reglas.
A las nuevas autoridades
Antes de irme, invité a los que serán los principales representantes del Estado, para que como yo vieran el desenvolvimiento del organizado lugar. Sin chistar aceptaron acompañarme y tremenda fue la sorpresa que recibimos. Allí primero ponen en práctica la formación que reciben dentro del hogar, luego cumplen las reglas de la comunidad y, de esa forma respetan las leyes de la sociedad.
¡A poner en práctica!
Me sorprendió ver cómo mis invitados del nuevo gobierno, todo lo anotaban para, desde que asuman el 16 de agosto, poner las cosas claras en el país. Hacer una radiografía en esos sectores en los que agreden a las autoridades del orden púbico, a los representantes de los medios de comunicación y a quien trate de impedirle que “gocen su vida” aun cuando el peligro del Covid-19 acecha.
Ética y seriedad
Otras anotaciones que hicieron las nuevas autoridades, fueron sobre la ética y la seriedad con que se manejan los servidores públicos. En aquella ciudad fabulosa se respetan los poderes del Estado. Cada uno (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) tiene su independencia y eso se mantiene por encima de todo. El caso es que saben que es en el respeto que está el buen funcionamiento de un gobierno y a eso apostarán.
El desgaste de los principios
Llegó el momento de volver a nuestra realidad, pero ya más tranquilos porque, aunque llegamos a una ciudad que no respeta nada ni a nadie, con los apuntes que tienen las nuevas autoridades, de seguro volveremos a vivir en un lugar donde al menos se le tema a caer preso. No hay duda de que se han desgastado los principios y mientras más avanza esta práctica, mayor es el peligro al que nos exponemos sobre todo, en estos momentos de pandemia en los que no se hace caso ni a un toque de queda y mucho menos a las medidas sanitarias que han de asegurarnos la vida. Por eso y por muchas otras cosas, se hace necesario rescatar el respeto para que logremos vivir en una ciudad fabulosa.