“Asesino del futuro”

Viendo la filmografía del director y guionista de este film, “Looper”, caímos en cuenta de que este señor, Rian Johnson, norteamericano, 39 años, había hecho hasta la fecha apenas dos películas y unos cuantos episodios de TV (Breaking bad, entre ellos), pero que uno de esos, “Brick”, del 2005, lo vimos y ciertamente nos gustó mucho. El otro, “The brothers Bloom”, del 2008, no se paseó por estos lados y por ende no lo conocemos. Y sucede que uno no espera gran cosa de directores que se están abriendo paso, a pesar de haber visto algo bueno suyo, pero, caramba, para no estar esperando, lo que se nos vino encima nos dejó patidifusos. Porque “Looper” es una pieza cinematográfica sorprendente tanto por la historia que cuenta como por su puesta en escena. Es ciencia ficción, es “thriller”, es un problema psicológico de parte de su personaje central, es como usted la quiera enfocar, pero desde cualquiera de esos puntos de vista es diferente y es realmente excelente. Se nos hace difícil adentrarnos en un análisis detallado de la historia porque el más mínimo desliz puede hacer que les birle al espectador el gusto de descubrir el intríngulis que propone y resuelve. Podemos sí decir que el personaje central, Joe, es un “loop”, que es un individuo encargado de asesinar y hacer desparecer personas. Podemos decirles que la trama se desarrollo en 2044, pero que los seres que son llevados a ese 2044 provienen de un futuro aún más lejano, en el cual es prácticamente imposible hacer desaparecer un cadáver, por lo cual existe esa organización que los envía al mencionado año donde el grupo cómplice se encarga de recibirles siempre en el mismo lugar para cada diferente “loop”, quien lo recibe atado y con la cabeza cubierta y, además, con una carga de lingotes de plata que son la paga del asesino, quien no bien aparece la víctima le dispara, le saca la plata y lo lleva a un lugar preparado para su “desaparición”. Pero no podemos agregar nada más por lo que ya dijimos, sólo que si un “loop” permite que su víctima encargada escape tiene un gran problema encima. La edición de este film es vertiginosa y, como muy a menudo pasamos de presente a pasado y de un lugar a otro, el espectador, se lo recomendamos claramente, ha de estar siempre muy alerta para no perderse. Si así lo hace, estamos seguros de que podrá aprehender con certeza el significado de esta problemática que ofrece Johnson y que, cuando así lo logre, quedará pasmado pero también entusiasmado por la suprema destreza empleada por el guionista en la creación de esta charada. Por supuesto, nada de ello sería posible de no ser porque Johnson, a más de ser muy bueno creando dicha historia, es también excelente como director porque se hace más que evidente que, aunque aparezca el nombre de un editor, es él quien está detrás de esos cortes violentos, de esas ráfagas de tomas de acción, de esa combinaciones de imágenes y sonido que nos hacen abrir mucho los ojos e inclinarnos en la butaca, amén de la destreza del movimiento de la cámara de Steve Yedin y la diestra manipulación de la música y los efectos sonoros de Nathan Johnson. Así que, repetimos: “Looper” es un plato fuerte para quienes realmente aman el cine.