Cineastas felices en cortos y sin la comedia

Los cortometrajes están de moda. Jóvenes cineastas los aprovechan para experimentar y disfrutar la libertad de no recurrir a la manoseada comedia. Por segundo año consecutivo se celebró ayer el festival de cortos “En el mismo trayecto del sol”, en la Cinemateca. “Nuestra comedia es muy regional y debemos crear nuevos códigos para compartir nuestro cine con otros países”, dijo Mario Núñez, productor del festival. Concepto En esta ocasión se incluyó el corto “Cara/escudo”, dirigido por Violeta Lockhart, estudiante de Comunicación Social de la Pontificia Universidad Madre y Maestra (PUCMM). La vida de una mujer que es violada a los 12 años y en su adultez mata a su victimario sin saber que es el padre de su novio, fue narrada con “El mundo es algo chico librado”, de Tito Rodríguez. Juan Namnúm hizo sentir al documental “Migración y cine dominicano”, una mirada al tratamiento de esta situación desde la cinematografía y la perspectiva de personas reales protagonistas de la misma. La diáspora también tuvo lugar en este encuentro. Salvador Sol Valdez, nacido en Canadá pero con raíces dominicanas, proyectó “Siempre pa lante” y “Cold”, historias que narran el sueño de un niño pelotero, y dos mujeres que deciden estar juntas por amor. Otros cortos fueron “Si yo pudiera salvarte”, de Bladimir Abud y “Hasta que la muerte nos...”, también de Rodríguez. Estos jóvenes se aventuran a crear producciones alejadas del “negocio”, que es lo que limita al arte, según Sol Valdez. “A la gente le gustan las historias”, afirmó Namnúm, pero esas de las buenas que elevan al cine local no solo aquí, sino en el extranjero. Ya lo hicieron “La hija natural” y “Jean Gentil”. Estamos en tiempos en que se crece el séptimo arte dominicano. PREMIACIONES Y PROYECTOS RECONOCIMIENTO: Algunas propuestas de estos jóvenes han sido premiadas en el extranjero. Mario Núñez y Tito Rodríguez fueron galardonados por “Mi papá está en el cielo”, presentado en FUNGLODE el pasado año. “La carta”, de Francisco Alberto Rodríguez, fue galardonado como el Mejor Cortometraje Dominicano en los premios Kodak del 2005. Algunos de los planes de los cineastas se enfocan en proyectar estas cintas a través de teléfonos móviles y proyectarlas también en escenarios populares.