Restaurant Pedro, un lugar ideal y elegante

El placer y el orgullo de poder ver difustrar a las personas que visitan el restaurante de los servicios ofrecidos, es la la mayor gratitud de poder realizar mi trabajo, afirma Pedro Gascón, su propietario. Una historia marcada por la casualidad, llegar a Santiago no era parte de sus planes, radicaba en Puerto Plata y se traslada a Santiago donde pasa a formar el restaurante con especialidades italianas llamado Roma, dirigiéndolo por 20 años. Su experiencia en el mundo culinario se remonta a los bares de Madrid e Inglaterra, desde sus 14 años sirviendo como chef, camarero y encargado de cocina. Para el 2005, introduce en los albores de Los Jardines Metropolitanos, de Santiago, el espacio llamado hoy dia Restaurante Pedro, casa primera y única de las especialidades española en la ciudad. Ambiente vanguardista, de donde brotan colores neutros marrón, crema, blanco y dorado, que ponen detalles al rincón de la comida española degustada por los comensales, combinando lo simple y llano en una esfera de cristales y platos elaborados por expertos de la casa. Llevados de la mano de la música clásica instrumental, para complementar el momento a pasar. (+)UNA GRAN VARIEDAD DE PLATOS EN OFERTAEl lugar ofrece un menú que abarca casi 60 platos variados de la cultura española, que incluye entradas, caldos, ensaladas, arroces, pastas, pescados, mariscos y carnes. Un sofrito de marisco mezclado con un arrocito que va al horno y que denominan la paella marinera, es uno de los platos preferidos por el público que lo visita. El langostico por su parte, es la apertura de la langosta por mitad dando toques con vino, perejil, ajo y aceite de oliva, listo para degustar. El equipo de trabajo. El trabajo en equipo basado en el compañerismo motivado por Pedro, hacen del lugar un espacio más especial. Son 11 los que atienden para el disfrute del lugar. Iván Rafael Gómez López es el chef de los platos especiales ofrecidos en el lugar, distinguido por su trucha asalmonada, donde vierte las hierbas sobre una cama de fetuccini con la salsa de azafrán.