MADRE
Mujeres con muchas facetas
LA MATERNIDAD ACTUAL DESAFÍA TRADICIONES
Es difícil definir con palabras a un ser que siempre lo hace con acciones. Amor, fuerza, entrega, abnegación, pasión, delicadeza, dulzura y muchos otros sentimientos se resumen y los celebramos en una sola palabra: madre. Aquellas que brindan el primer saludo del amanecer con un beso. Las que temprano se levantan para, en el calor del fogón, hacer el desayuno antes de que sus hijos e hijas vayan a la escuela. Las que preparan la lonchera. Las que forma en valores. Sin ser científicas, descubren la fórmula de eternizarse. Su laboratorio es el hogar, donde paso a paso dejan las huellas para ser perpetuas en el mundo. Lasmadres sin mujeres tan fuertes que son capaces de fortalecerse en los fracasos. Tan nobles y frágiles, que sufren en carne viva desmayos ajenos. Capaces de llorar de emoción y de reír por la felicidad de aquellos a quienes dieron vida. Una madre calma el dolor con el roce de sus manos. Madre, la que consiente y corrige, la que castiga y deja pasar. Cual artesano, forma y da brillo a su tesoro. En el campo y la ciudad. COMPARTIR EN LA ADOLESCENCIAPatricia Cornelio es madre de un chico de 17 años, Patrick Jan. “Saber que de ti salió un ser maravilloso es una bendición de Dios”, dice la dama. Divorciada, enfrentó el compromiso de sacar adelante a su hijo, de criarlo y convertirlo en un hombre de costumbres sanas para la sociedad. Patricia divide su tiempo entre su pequeño, como le dice y ser ejecutiva de ventas de LISTÍN DIARIO. Es importante en esta etapa de la adolescencia, crear lazos de confianza con los hijos. Sentarse a conversar, orientarlos y enseñarles lo correcto con mucho cariño. Aprovechar el tiempo que pueden compartir, para que esa formación esté en su interior, cuando no están juntos.El tiempo pasa muy rápido, asegura la joven, que no se arrepiente de haber dejado su carrera de Administración Hotelera para cuidar de su hijo. Mayo, un mes para festejarlasLa mujer de hoy es amiga, hermana, ejecutiva, trabajadora, empleada, esposa, hija y madre a la vez. Madres sin límites, sin fronteras; que luchan, que ríen, que viven. La liberación femenina, que se ha alcanzado a base de mucho sudor y esfuerzo, trajo consigo que las mujeres desempeñen varios roles en la sociedad, sin perder el placer y carisma del cuidado del hogar, de ser mamá. La sociedad de hoy no exonera a la mujer de ninguna responsabilidad familiar, aunque trabaje en un puesto muy demandante. Esto le compromete a ser clase A en todos los renglones que desempeña, asegura María Eugenia Acosta, gerente de operaciones de Cooperativa Vega Real, estudiante de maestría en Gestión de Empresas y madre de 4 hijos e hijas, lo que dice disfrutar a plenitud. “Ser ejecutiva es mi profesión, pero ser madre es mi pasión”, afirma. Su orden de prioridades se inicia con su familia, un esposo que le acompaña desde hace 22 y años y los príncipes y princesas de su corazón. “Les dedico tiempo real y de calidad”, confiesa María Eugenia. Es importante cuando los retoños de la vida crecen involucrados con el trabajo de sus padres. La ejecutiva dice que ha logrado mucho porque sus hijos han sido comprensivos y solidarios con sus labores, y además, ella los ha involucrado en sus proyectos. ExperienciaMaría Eugenia cuenta el gran reto que tuvo siendo aún muy joven, “mi segunda hija, Chantall, nació pocos meses después de mi primer hijo, Ronin. Tenía que lactarlos alternativamente. “La experiencia de lactar a mis hijos, para mí, fueron los momentos más maravillosos de la maternidad. La comunicación que tenía con ellos en ese momento, sus ojitos mirando los míos, sus manitas sosteniendo mis dedos, su calorcito. La sensación de alimentarlos directamente de mi cuerpo, fue una experiencia inigualable”. Haydeé Domínguez, es madre de tres pequeños, Joyce, Obed y Sophía. Psicóloga Clínica y terapeuta de parejas, ofrece consultas en una clínica privada de Santiago; es facilitadora universitaria, miembro del Comité de Bioética del Oncológico y atiende dos proyectos personales. Con todo esto, el tiempo de compartir con sus hijos es sagrado y sus compromisos no impiden que les dedique cuidados. Domínguez dice que ser mujer multifacética es una labor intensa, pero enriquecedora. “Como madre, junto a mi esposo, hemos invertido energías y estimulación mientras estaban más pequeños y esto nos ha brindado niños con muchos valores e inteligencia”, dice la especialista de la conducta humana. Su esposo ha sido una pieza clave para que ella pueda desempeñar sus labores con éxito, él también acompaña a los niños, hace tareas, baña, viste, juega y disfruta con ellos. Para Haydeé la mujer moderna que es madre, profesional, y atiende otros aspectos, es muy valiente. No hay un único reto, sino muchos, dice ella. Hay que ser bien organizada para resolver todo, agendar. Esmeralda Espejo, Chariro, como se le conoce en la radio, es mocana y adoptada por la Ciudad Corazón.Productora, conductora y gerente de tres estaciones radiales. Es madre de dos pequeños, Víctor José y Ámbar, lo que ha significado -comenta- dejar de pensar en sí misma, porque todo depende de ellos. Amamantar un pedacito de su propio ser, dice, es la mejor experiencia. Atender tantos pendientes no es tarea fácil, pero acomoda su tiempo con las clases de sus hijos y con las actividades extracurriculares. “La vida moderna, en la que atendemos varios roles, requiere que nos convirtamos en un mujerón”, dice Charito.