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PRESENCIA DOMINICANA

Jesús Alou en Lidom

En 1988 Jesús Rojas Alou fue exaltado al Pabellón de la Fama del Deporte dominicano, ese honor no lo recibió por su labor en las ligas mayores, fue por su extraordinaria contribución en la Liga dominicana.

Debutó en la campaña de excepción que fue la de 1960-61, efectuada absolutamente con jugadores nativos debido a la conflictiva situación política que imperaba por la agonía del régimen de Trujillo. Su experiencia era de clase D, como se conocían entonces las ligas de novatos, había logrado promedio de bateo de .352, segundo mejor del circuito, su compañero Gil Garrido lo superó disparando para .362. y desde entonces enseñó su enorme capacidad para hacer contacto, apenas se ponchó 38 veces en 554 apariciones al plato.

En Lidom en el señalado certamen ganó el título de Novato del Año al jugar en el bosque izquierdo del Escogido, franqueado por sus hermanos Mateo en el centro y Felipe en el derecho. Ese trío repetiría en las próximas siete campañas.

Cuando finalizó su carrera estaba entre los diez mejores en promedio de bateo

(.302), hits conectados (865), dobles (136), bases alcanzadas (1,088), carreras empujadas (339) y anotadas (303). Fue el primero en alcanzar el hito de los ochocientos hits en 1978-79 y estuvo como líder de ese departamento hasta que en

1987-88 lo superó Miguel Diloné. Diez bateadores en la historia del circuito han alcanzado seiscientos o más hits, pero solo cuatro de ellos lo lograron sosteniendo un promedio de más de .300: Manuel Mota (.333), Mateo Alou (.326), Luis Polonia (.304) y Jesús Alou (.301).

Participó en veinte campañas en Lidom siendo un estelar tanto del Escogido como del Licey, al extremo que en 1983 fue elegido uno de los tres mejores jardineros de todos los tiempos de los Tigres a esa fecha y en 1995 ocupó el cuarto lugar en ese mismo aspecto con los Leones, Pedro Guerrero lo superó por un voto para el tercer jardinero.

Un legítimo bateador de trescientos, en su carrera como profesional en todos los niveles alcanzó 3,069 incogibles en 10,147 turnos para porcentaje de .302.

Definitivamente, Jesús Rojas Alou dejó un legado eterno en el béisbol dominicano.

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