Cumpliendo a medias

En su regreso al estadio, luego de dos años de ausencia, los fanáticos aceptaron de buena manera anoche el protocolo sanitario aplicado a la entrada en el inicio del torneo de béis­bol otoño-invernal de la Repú­blica Dominicana.

No obstante, una vez en­traron al viejo parque y ocu­paron sus localidades, mu­chos retiraron el tapabocas como para poder vociferar mejor las jugadas “¡Licey campeón!, “¡Ruge, ruge el León” y otras consignas que dan sabor al tradicional pa­satiempo.

“Su tarjeta de vacunación, caballero”, le solicitó Juliana Bobonagua, una de las da­mas del personal de seguri­dad que están en los pasíme­tros del Estadio Quisqueya Juan Marichal, a Olivo Ga­rabito (Papiro), un ferviente fanático de los Tigres del Li­cey, y del béisbol, que ha ido a las últimas 18 ediciones de la Serie del Caribe.

“Muy contento de volver al ´pley´. Eran dos años sin venir, sin poder disfrutar del ambiente que se vive aquí”, declaró “Papiro”, quien lue­go mostró los diez abonos de palcos que todos los años compra para su familia dee­trás del dugout azul.

“Es lo mejor que puede pasar”, manifestó, de su la­do, Jorge Arache, de 58 años, a quien no hubo que preguntarle cuál es el equi­po de su simpatía porque la réplica de la chaqueta roja de los Leones que llevaba puesta y la gorra lo delata­ban de cuerpo entero.

”Soy un fanático mil por mil del Escogido”, enfatizó .“Estaba desesperado por venir al play. Ya estamos aquí otra vez. Me pidieron la cédula y la tarjeta de va­cunación porque no sirve de nada si yo estoy vacunado y el del lado no”, subrayó.

“Antes de la taquilla, el portero me pidió la tarje­ta de vacunación. Veo muy bien eso”, señaló Gerardo Sánchez, quien no ocultaba el deseo de respaldar al Li­cey militantemente en un ambiente donde la cuerda es parte del entretenimiento.

De manera ordenada, los fanáticos, como en proce­sión, entraban con ascari­llas puestas.

Dentro, la indisciplina de una gran parte se impuso y a vocear a todo pulmón si­nel tapaboca.

SEPA MÁS Centro de vacunación Punto A la entrada del “grand stand”, el Ministerio de Salud Pública habili­tó un centro de vacuna­ción con la finalidad de inyectar la dosis de Sino­vac, Astra Zeneca o Pfi­zer al fanático que quie­ra ver el juego y no esté vacunado.

Horario Da servicio desde las 8:00 a.m. En el horario de la tarde laboraran las enfermeras Yoelys Cruz, Laura Ortega y Heidy Peña, así como el inspec­tor Miguel de Dios.