Tras decepción, futuro Bravos es promisorio
Hubo firmes declaraciones de tristeza y esperanza de los jugadores y del mánager Brian Snitker luego de que los Bravos de Atlanta se quedaron a una victoria de alcanzar la Serie Mundial.
El dolor fue obvio tras una derrota el domingo por 4-3 contra los Dodgers de Los Ángeles en el séptimo juego de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional. Los Bravos lideraban la serie 3-1. Tuvieron ventajas de 2-0 y 3-2 en el encuentro decisivo y aún así se quedaron con las ganas de tener su primera comparecencia en la Serie Mundial desde 1999.
“Lo detesto”, dijo Snitker. “Tengo tantas ganas de ir a la Serie Mundial”.
Por su parte, Freddie Freeman ofreció una perspectiva más equilibrada cuando habló sobre el dolor que se vive ahora y la promesa del mañana. “Duele ahora mismo, realmente duele”, comentó Freeman.
“Este momento apesta, pero la organización de los Bravos de Atlanta está preparada para el éxito desde hace tiempo. El grupo de muchachos que tenemos este año es el comienzo de algo especial”.
La esperanza se ve impulsada por el surgimiento de los jóvenes pitchers abridores Ian Anderson, Kyle Wright y Bryse Wilson. Los tres aprovecharon sus oportunidades en la lomita durante la temporada acortada por la pandemia de coronavirus, debido a que la rotación de Atlanta estuvo plagada de lesiones y malas actuaciones.
El as Mike Soroka apenas pudo realizar tres aperturas antes de que quedara fuera de la campaña por una lesión en el tendón de Aquiles. Cole Hamels apenas registró una apertura. Mike Foltynewicz y Sean Newcomb fueron descartados, y Tommy Milone, que se unió al equipo a la mitad de la temporada, fue colocado en la lista de lesionados tras tres aperturas deficientes.
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Interrogante
Marcell Ozuna lideró la Nacional con 18 jonrones y 56 impulsadas tras firmar por 18 millones de dólares y un año. El jardinero dominicano encajó perfectamente en la alineación. Pero ahora vuelve a la agencia libre.