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Texans despiden al entrenador Bill O'Brien tras inicio de 0-4

El entrenador en jefe de los Houston Texans, Bill O'Brien, en el centro, da señales desde la línea lateral durante la segunda mitad de un partido de fútbol americano de la NFL contra los Pittsburgh Steelers en Pittsburgh, el domingo 27 de septiembre pasado.

El entrenador en jefe de los Houston Texans, Bill O'Brien, en el centro, da señales desde la línea lateral durante la segunda mitad de un partido de fútbol americano de la NFL contra los Pittsburgh Steelers en Pittsburgh, el domingo 27 de septiembre pasado.

Los Houston Texans despidieron este lunes al entrenador y gerente general Bill O'Brien.

El despido se produce un día después de que la derrota del domingo 31-23 ante los Vikings dejara a los Texans a 0-4 por primera vez desde 2008.

"En este negocio, es un negocio de resultados y no pudimos llevarlo a donde necesitábamos", dijo O'Brien.

Después de asumir el papel de gerente general en la temporada baja, O'Brien recibió críticas casi universales cuando envió al receptor superestrella DeAndre Hopkins a Arizona por el corredor David Johnson y selecciones del draft.Cuando se le pidió que reflexionara sobre algunas de sus decisiones de personal, O'Brien dijo que no se arrepiente.

"Cada decisión que tomamos siempre fue en el mejor interés del equipo", dijo. “Tuvimos largas conversaciones. Investigamos mucho sobre ellos. Hubo cosas que sucedieron dentro de los muros de una organización que el público externo realmente nunca sabrá. Y así son las cosas ".

La presión sobre O'Brien solo se intensificó cuando los Texans tuvieron un comienzo terrible con Johnson luchando ya que su juego terrestre era el peor en la NFL y con la defensiva permitiendo la mayor cantidad de yardas en la liga.

O'Brien estaba en su séptima temporada en Houston, donde compiló un récord de 52-48. Ganó la AFC Sur cuatro veces durante su mandato, incluidos los dos últimos años.

Llegó a Houston después de pasar 2012-13 como entrenador en Penn State. El trabajo de los Texans fue su primer trabajo como entrenador en jefe de la NFL, pero pasó 2007-2011 trabajando para el entrenador Bill Belichick en Nueva Inglaterra, ascendiendo al papel de coordinador ofensivo en su última temporada.

El propietario del equipo, Cal McNair, anunció la decisión el lunes y agradeció a O'Brien por su trabajo con el equipo.

“El liderazgo de Bill hizo avanzar a nuestra organización mientras nos guiaba a cuatro campeonatos de la división AFC Sur, 52 victorias y múltiples apariciones en los playoffs durante su mandato”, dijo McNair en un comunicado. “Bill demostró ser un entrenador y líder en esta liga. Hablé con él hoy más temprano y le dije que nos estamos moviendo en una dirección diferente ".

O'Brien agradeció repetidamente a la familia McNair por la oportunidad de entrenar a los Texans y se disculpó por estar por debajo de sus expectativas.

"Le dije ... siento que no pudimos conseguir que este equipo supere la joroba, no pudimos superar la joroba el año pasado, el año anterior, pero obviamente a principios de este año", dijo. “Pero no fue por falta de esfuerzo. Ganamos cuatro campeonatos de división aquí de los que estamos muy orgullosos ... así que hicimos muchas cosas buenas aquí, pero no hicimos lo suficiente ”.

Romeo Crennel, quien fue el entrenador asistente del equipo, se desempeñará como entrenador interino durante el resto de la temporada.

“Tenemos un equipo talentoso y no tengo ninguna duda de que nuestros jugadores y personal se unirán para enorgullecer a los fanáticos de los Texans mientras nuestro objetivo es ganar campeonatos y hacer grandes cosas por la ciudad de Houston”, dijo McNair.

Antes del intercambio de Hopkins y el inicio sin victorias de Houston esta temporada, O'Brien fue criticado la temporada pasada por el desempeño del equipo en los playoffs.

Los Texans estaban arriba 24-0 en el primer cuarto contra los Kansas City Chiefs y parecían dirigirse a su primer juego de campeonato de la AFC, que habrían sido los anfitriones. En cambio, desperdiciaron la enorme ventaja inicial en la derrota por 51-31 ante los eventuales campeones del Super Bowl.

Fue solo la última decepción en los playoffs para un equipo que perdió en la ronda de comodines con O'Brien en 2015 y 2018 y también perdió en la ronda divisional en 2016.

"Entiendo que nos quedamos cortos en términos de llevar a este equipo más lejos en los playoffs", dijo O'Brien. “Pero me voy sabiendo que yo y el personal dimos todo lo que esta organización merecía y más. Trabajamos muy, muy duro para tratar de llevar esto a un lugar donde podría ser un programa de campeonato. Simplemente no lo hicimos ".

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