Consistencia en la receptoría

Cuando finalizó la pasada campaña de grandes li­gas se entendió que en la actual Yadier Molina al­canzaría con facilidad los dos mil juegos defendiendo la recep­toría; finalizó el 2019 con 1,947. La pandemia del Covid-19 deshizo ese anhelo.

La capacidad de combinar juicio y vigor que demanda el resguardo de esa posición convierte en una notable hazaña que un jugador logre partici­par, en su actuación en liga mayor, en dos mil o más partidos en dicha fun­ción. En la historia, apenas cinco han alcanzado esa cifra. Encabeza la lista Iván Rodríguez, puertorriqueño igual que Molina, que completó 2,427, co­sechando méritos que lo elevaron al Salón de la Fama con el agregado de ser considerado por muchos el más completo defensor del reducto de to­dos los tiempos. De los otros cuatro miembros del exclusivo cuadro, dos acompañan a Rodríguez en Coopers­town: Carlton Fisk y Gary Carter quie­nes estuvieron en 2,226 y 2,056 parti­dos respectivamente protegiendo el área; completándose con Bob Boone (2,225) y Jason Kendall (2,025).

Es notorio que los componentes del círculo pertenecen a la generación que emergió a partir de 1970. El pri­mero en llegar a la cantidad señalada fue Boone en 1988, superó de esa ma­nera a Al López que sostenía la marca desde su retiro ocurrido en 1947. Pos­teriormente fue aventajado por Fisk en 1993 y este a su vez por Rodríguez en 2009. López asimismo es miembro del Salón de la Fama, pero lo que mo­tivó su elección por parte del Comité de Veteranos en 1977 fue su gran tra­bajo, durante 18 temporadas, como manager de Indios y

Medias Blancas. No obstante se le reconocen además excelentes habili­dades defensivas como catcher.

Al momento de escribir lo que es­tán leyendo Molina sumaba 1,967 juegos en su carrera como catcher, to­dos con los Cardenales de San Luis. Con esa cantidad desplazó al domi­nicano Tony Peña de la sexta posi­ción en la lista de todos los tiempos, el cual acumuló 1,950. A los Carde­nales les falta consumar 32 juegos pa­ra cumplir su limitado calendario y a Molina 33 para llegar a los dos mil co­mo receptor, obviamente es imposible que eso suceda este año.