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PRIMER ROUND

Ruiz: Seis meses de fama y un regreso mal entrenado

La forma en que ganó el cetro máximo unificado por tres entidades a mitaqd de año el mexicano Andy Ruiz Jr. no dejó dudas de que en el boxeo nada está escrito y que los ‘decretos’ se caen con un solo golpe. Ya había ocurrido desde el inicio del mundo (Caín le dio un solo tablazo a Abel), pero para que nadie alegue ignorancia el mismo ‘palo’ que desmoronó el reinado del inglés Anthony Joshua el 1 de junio, ya había salido en la lotería del destino a supercampeones de la talla de Sugar Ray Robinson ante Randy Turpin y Bobo Olson, este último sordomudo; Alí frente a Leon Spinks y Trevor Berbick; Alfonso Zamora contra Eddie Logan, Julio Gervacio ante Kenny Mitchell; JC Chávez ante Frankie Randall, Terry Noris contra el nuestro, Cucuso Santana; George Foreman ante José Román, Steve Cruz versus Barry McGuigan, Roberto Durán y Kinkland Laing; y lo más parecido a Ruiz-Joshua, la anterior gran sorpresa, James Douglas fulminando a Mike Tyson el 11 de febrero de 1990, en Japón. Algunas de estas derrotas de grandes ídolos no fueron por KO, pero escandalizaron al mundo; muchos de ellos tuvieron la oportunidad, como Joshua el sábado, de obtener la revancha y reconquistar las fajas o sencillamente vengarse.

EL PESO LO ‘MATO’: Jamás aseguraría que a Andy Ruiz Jr. lo vendieron como lechón ‘asao’ en Arabia Saudita, pero es justo aclarar que se había publicado que Ruiz fortaleció su cuerpo perdiendo unos 30 kilos de ‘pura grasa’, y se veía ¡flaco!. Luego vieron que sería presa fácil con tan poco peso y los hidrataron a la carrera otra vez, logrando un alto peso con 21 kilos adicional, para 283 libras. No obstante, Ruiz mostró corazón y deseo de quedarse con los títulos, pero no pudo en tan malas condiciones físicas aun con más de un millón de dólares para hacer una buena preparación. Como latino, la plata, la lana, borraron el hambre del mexicano en tiempo récord. ¡Y se entregó!

ERROR Y FUGA: Joshua tuvo una caída dramática en New York, pero regresó boxeando en puntas de pies y a medio distancia, cometió algunos errores menores, en la escapada del ‘clinch’ corrió hacia la mano derecha del efímero monarca latino, quien le conectó algunos golpes que pudieron definir y repetir la historia, pero la buena preparación del inglés le permitió manejar la situación y sumar puntos para el final.

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