Jugador Más Valioso

La interpretación del concepto Jugador Más Valioso es el centro de una controversia. Muchos entienden que si el equipo de un atleta que ha realizado aportes significativos a su causa no logra una buena actuación este no puede optar a ese título, porque esos aportes no fueron suficientes para conseguir buenos resultados colectivos. No obstante, en cualquier deporte de equipo, las victorias, y las derrotas también, son causa de una serie de factores. Si los efectos generales son negativos no deben desmeritar el buen trabajo individual.

Este debate resurgió básicamente en torno a la figura de Mike Trout. Es difícil negar su calidad como jugador de béisbol; domina con maestría las cinco principales habilidades que se le exigen a un atleta que se desempeña en esta disciplina, aunque su contribución se diluye por la mediocre ejecución que casi siempre tienen los Angelinos, su equipo. En la campaña que finaliza estaba colocando en su casilla, otra vez, los números que avalan sea considerado para el señalado galardón, lamentablemente una lesión lo sacó de la acción a principios de septiembre y eso, de alguna forma, reduce esas posibilidades.

Esto ha concentrado la competencia en la Liga Americana en DJ LeMahieu y Alex Bregman. Ambos han realizado un excelente trabajo para Yanquis y Astros cubriendo espléndidamente posiciones defensivas en la que lesiones ausentaron a los titulares, aportando además una recia ofensiva. En ese escenario favorezco a LeMahieu; se mantuvo sano todo el año aceptando mudanzas aún cuando es considerado el más completo defensor del segundo cojín de la actualidad.

En la Liga Nacional ocurrió algo similar; una lesión sacó a Christian Yelich de juego el pasado día diez y eso aumentó las posibilidades de Cody Bellinger y Anthony Rendon para el premio, aunque el jardinero derecho de los Cerveceros tiene amplias perspectivas de finalizar con las coronas de AVG/OBP/SLG del circuito, algo que no se logra desde Barry Bonds en el 2004.

Me inclino por Bellinger debido a su excelente habilidad para defender el bosque derecho, respetando a Rendon por el completo aporte que ha hecho al sorprendente éxito de los Nacionales como su antesalista.