Bullpen de Boston sin Craig Kimbrel

Los Medias Rojas de Boston, actuales campeones de las Grandes Ligas, continúan su preparación para la temporada de 2019 sin contar con un cerrador probado en su roster.

Mientras, Craig Kimbrel, dueño de esas funciones los últimos tres años, continúa desempleado. Es un contraste inesperado, extraño. Pero refleja la realidad del mercado en 2019.

Kimbrel viene de una temporada en la que salvó 42 partidos, tuvo un PCL de 2.74 y una proporción de casi 14 ponches por cada nueve entradas. En otras palabras, una actuación que de primera impresión fue consistente con el dominante historial del “stopper” de luxe.

No obstante, si observamos con un poco más de profundidad el desempeño de Kimbrel en 2018, hay algunas señales que mueven a preocupación. El derecho otorgó 4.5 transferencias por cada nueve entradas, segunda peor proporción en su carrera. Tuvo la frecuencia de cuadrangulares permitidos más elevada de su carrera y la segunda peor efectividad desde que llegó a las mayores.

Además, tuvo un PCL de 4.57 después del juego de estrellas y la velocidad promedio de su bola rápida mostró una disminución de más una milla por hora con respecto a 2018.

Y claro, también está el tema de la post-temporada. En esa etapa, Kimbrel permitió carreras en sus cuatro primeras presentaciones, obligando a Alex Cora a hacer ajustes no planificados en las entradas finales de los partidos de los Medias Rojas.

Aunque salvó seis partidos y lanzó mejor en el tramo final de los playoffs, tuvo un promedio carreras limpias de 5.90 y dejó un aura de vulnerabilidad que en nada ayudó su causa a la hora de declararse agente libre. Sobre todo al filtrarse la información de que aspiraba a un contrato de seis temporadas y alrededor de US$100 millones de dólares.

Así las cosas, aquí estamos a unas semanas del inicio de la temporada 2019 y Kimbrel todavía espera por una oferta que le satisfaga. Se menciona a Atlanta como un destino probable para el lanzador derecho, quien inició su carrera en esa organización.

Mientras, el equipo de Boston trata por todos los medios de evitar un incremento significativo de su nómina que provocaría un pago exorbitante del llamado “luxury tax” (impuesto al lujo) y además perder posicionamiento en el venidero sorteo de novatos.

Eso nos lleva al bullpen de los Medias Rojas, que luce en este momento como su principal debilidad. Más aún después de anunciarse ayer una suspensión de 80 partidos para el nudillista Steven Wright, quien se proyectaba para tener un rol importante luego de lanzar 29.2 competentes entradas como relevista el año pasado.

A pesar de esta baja, la gerencia del equipo no tiene planeado realizar adquisiciones significativas durante la primavera. Por lo menos si nos basamos en los reportes de las últimas horas.

Siendo así, ¿cómo estaría configurado el cuerpo de relevistas del dirigente Cora?

Matt Barnes y Ryan Brasier serían los dos principales hombres, y anticipamos que ambos manejen situaciones de salvamento. Barnes tiene el “stuff” para dominar y lo demostró el año pasado, cuando ponchó 14 bateadores por cada nueve entradas. Pero se ha caracterizado por su inconsistencia, demostrada en su PCL de por vida de 4.14.

Brasier brilló como un novato de 30 años, logrando efectividad de 1.60 en 34 apariciones y destacándose por su sangre fría en momentos apremiantes de los playoffs.

Heath Hembree, Brian Johnson y el mexicano Héctor Velásquez serían los siguientes en importancia. Los últimos dos pueden relevar entradas múltiples y serán utilizados como abridores ocasionales cuando Cora entienda que uno de los regulares de la rotación necesita descanso extra.

Un par de nombres interesantes en la ecuación son Tyler Thornburg y Colten Brewer. El primero tuvo una dominante actuación con los Cerveceros de Milwaukee en 2016 (PCL de 2.15, 12 salvamentos y 90 ponches en 67 entradas), provocando que el gerente de los Medias Rojas Dave Dombrowski cediera a Travis Shaw y un par de prospectos para adquirirlo.

Luego de verse limitado por problemas en el hombro en 2017 y 18, Thornburg ha mostrado una bola rápida de 94 a 96 mph desde el inicio de los entrenamientos con un par de sólidos lanzamientos secundarios. Necesita mejorar su comando para aprovechar lo que probablemente sea su última oportunidad de brillar en Boston.

Brewer, por su parte, fue adquirido desde los Padres de San Diego en la temporada muerta. Resultó atractivo por un poderoso cutter (entre 94 y 96 mph) que combina con un buen lanzamiento rompiente. Todo lo que el derecho de 26 años tira se mueve y su “spin rate” es de los mejores del equipo. Anoten a Brewer como un candidato para sorprender en 2019.

Brandon Workman es un derecho que ya ha sido probado en situaciones de presión, siendo parte de los equipos campeones de 2013 y 2018. Con mejor condición física y repertorio de tres lanzamientos, podría lanzar en múltiples roles para los Medias Rojas.

Aunque es indiscutible que las ausencias de Kimbrel y Joe Kelly (firmado por los Dodgers) debilitaron este cuerpo de relevistas, la gerencia entiende que tiene suficiente material para navegar la temporada con éxito a pesar de no hacer inversiones significativas para fortalecerse.