Los Atléticos incontenibles

El viernes 15 de Junio, los Atléticos de Oakland perdieron un partido en casa ante los Angelinos de Los Angeles en Anaheim, desmejorando su récord a 34-36.

Al combinarse esa derrota con una victoria de Seattle, se alejaron a 11 juegos de los Marineros en la carrera por el segundo comodín de la Liga Americana.

Desde entonces, la situación ha cambiado dramáticamente.

Hasta el miércoles, los Atléticos se encontraban en medio de una racha de 26 victorias en 33 partidos, acercándose a juego y medio de Seattle.

Y es interesante revisar cómo han llegado esos triunfos. En 17 de los 26, han logrado venir de atrás para ganar. En 12 de ellos, han borrado déficits del octavo episodio en adelante. Los Atléticos encabezan las Grandes Ligas en carreras anotadas a partir de la séptima entrada con 201. Con este equipo, el rival no puede cantar victoria hasta el out 27.

Con un roster sumamente diverso y carente de nombres realmente sonoros, los Atléticos están metidos de lleno en competencia.

A pesar de tener la nómina más baja del béisbol, de acuerdo a los números del día inaugural.

Venir de atrás, una costumbre El partido emblemático de la capacidad de contragolpe que exhíben ocurrió el martes de esta semana en Arlington. Al completarse seis entradas del juego contra Texas, los Atléticos perdían 10-2. De ahí en adelante anotaron 11 carreras sin respuesta y, gracias a un estacazo decisivo de Khris Davis, ganaron el partido 13-10 en 10 episodios.

Al día siguiente, perdían 5-1 luego de seis episodios cuando nuevamente emboscaron el relevo de Texas detrás del bate de Davis, quien produjo un jonrón de tres carreras en el séptimo y otro con un compañero a bordo en el noveno que viró el marcador en una victoria 6-5. Así ha sido la historia reciente de los Atléticos, que encabezan las mayores en cuadrangulares como visitantes con 94.

Restándole 10 partidos frente a los Marineros, se han convertido en una alternativa viable en la competencia por el mencionado segundo Wild Card.

Ofensiva peligrosa Davis va camino a una tercera campaña consecutiva de 40 o más cuadrangulares, y es el líder de esta ofensiva. El intermedista Jed Lowrie ya estableció una marca personal de jonrones y va camino a conectar casi 70 extrabases en la mejor temporada de su carrera. Stephen Piscotty batea .305 con Slugging de .599 desde el 1 de junio, aportando 11 para la calle, 31 remolcadas y 15 dobles en ese período.

Y aún no mencionamos al inicialista Matt Olson y el antesalista Matt Chapman, dos estrellas en ciernes con sobrado poder de jonrón y excelente defensa. Chapman es todo un espectáculo jugando la tercera base y encabeza las Grandes Ligas en carreras preservadas con su defensa. Puede que su futuro incluya múltiples Guantes de Oro. Olson deberá pasar de 30 cuadrangulares y ha sido el mejor inicialista de la Liga Americana de acuerdo a las métricas defensivas modernas.

Así las cosas, el dirigente Bob Melvin cuenta con un núcleo atractivo y capaz de contribuir a muchas victorias.

Respetable bullpen El bullpen es otra fortaleza de este equipo, demostrada con su récord de 40-0 cuando tienen ventaja después de siete entradas.

Blake Treinen ha sido uno de los cerradores más efectivos del béisbol, con PCL de 1.04, WHIP de 0.96 y un promedio de la oposición de .167. El derecho de 30 años, descarte de los Nacionales de Washington, suma 26 salvamentos y una proporción de casi 12 ponches por cada nueve entradas. Su bola rápida ronda las 97 mph con letal movimiento.

El novato Lou Triviño ha sido un dominante preparador, con marca de 8-1, 1.33, WHIP de 0.95 y apenas 26 hits permitidos en 47.1 entradas. Y ahora se agrega el dominicano Jeurys Familia, adquirido desde los Mets el pasado fin de semana.

Familia ha salido con victorias en sus dos primeras presentaciones con el equipo. Fortalece tremendamente ese bullpen, considerando que tiene experiencia como cerrador y ha lanzado en la post-temporada. Yusmeiro Petit y Emilio Pagán han sido importantes piezas de complemento para Melvin, igual que Ryan Buchter.

Pitcheo abridor, principal debilidad Está claro que un equipo con una nómina modesta (unos US$66 millones al iniciar la temporada) tendrá sus imperfecciones.

En el caso de Oakland, la debilidad principal está en su rotación. El dirigente Bob Melvin se ha visto obligado a utilizar 12 abridores en esta temporada y sólo Sean Manaea ha mostrado consistencia. Las lesiones han sido parte del problema, con veteranos como Trevor Cahill y Brett Anderson perdiendo gran parte de la temporada. Ambos ya están de regreso, uniéndose al trotamundos Edwin Jackson y al dominicano Frankie Montás como opciones del momento. Precisamente ayer, Billy Beane, famoso vicepresidente Ejecutivo de Operaciones de Béisbol del conjunto, declaró que tiene la intención de mejorar el roster a través de cambios. Sabemos que la disponibilidad de abridores confiables es muy pobre, pero la rotación sería el mejor lugar para agregar talento.

Mientras tanto, los Atléticos de Oakland están metidos en competencia, algo que no esperábamos semanas atrás.