CON LOS CAMPEONES
Los entrenamientos primaverales de GL

TAMPA.- Desde el pasado miércoles me encuentro en Florida, cubriendo los entrenamientos primaverales del béisbol de las Grandes Ligas y a pesar de que ya han transcurrido más de 30 años desde la primera vez que estuve por estos predios en labores similares, sigo disfrutando al máximo de la experiencia.
Parques funcionales
El trabajo periodístico nos obliga a llegar temprano a los complejos de las diferentes organizaciones, coronados por pequeños, pero hermosos y funcionales parques de pelota, remozados para que cada febrero reciban a los miles de aficionados, que luego de la obligada pausa del invierno, acuden animosos a disfrutar del juego de pelota y a ver en acción a sus ídolos.
La batalla
Jóvenes ansiosos por demostrar su talento, veteranos en busca de una nueva oportunidad y estelares que tratan de producir al más alto nivel para conservar su cotización. Esa es la eterna batalla de cada primavera, que permite a cotizados prospectos codearse en el mismo escenario, con las estrellas del juego y con peloteros que ya han visto pasar sus mejores años, pero que se resisten al retiro.
Escenario ideal
La calidez de los estados sureños (Florida y Arizona) en esta época del año, ha servido de escenario ideal para que los jugadores se pongan en forma y puedan afrontar una extenuante campaña. Todo esto, en un ambiente más relajado y distendido que la temporada oficial, aunque con un sistema organizativo, liderado por personas de la tercera edad, la mayoría de empleados retirados, que roza la perfección.
Atracciones
Cada jornada de los entrenamientos resulta un gran espectáculo que hay que disfrutar alguna vez. La gente que llega temprano al estadio, buscando autógrafos, no importa el jugador que sea, pues nadie sabe cuál de ellos será una estrella en el futuro. Una multitud de peloteros ejercitándose en frente a los dugouts, comandados por una infinidad de entrenadores y el público que se aglomera en la parte de atrás de las verjas de los jardines, sentados sobre la grama, mostrando un entorno único que sólo se viven en las prácticas de pre-temporada.
Los fanáticos
Pantalones cortos, camisetas, gorras, sombreros y piel bronceada, distinguen al fanático que acude a los juegos de los entrenamientos primaverales, quienes además son ávidos consumidores de perros calientes, cacahuates y cervezas
Oportunidad única
Los entrenamientos ofrecen a periodistas y fanáticos la oportunidad única de ver acción a los principales jugadores de cada organización, sin importar su clasificación en los circuitos minoritarios. En ese tenor, es frecuente que en un mismo partido jueguen estrellas de clase A, doble y triple A, algo que no puede ocurrir en ningún otro momento de la temporada.
La prensa
Es por eso que dentro de la efervescencia de las prácticas, ejercicios y partidos que resultan una mescolanza de bisoños y curtidos, la prensa, grabadora o cámara en mano logra exclusivas para sus distintos medios, algo que difícilmente podrá el resto del año sin movilizarse miles de kilómetros.
A jugar pelota
El olor húmedo de césped reciente cortado, la cuadrilla de empleados acondicionando el terreno, jugadores estirando sus músculos, infinidad de guantes y pelotas en el campo y luego, el sonido del bate al conectar la pelota y de los lanzamientos golpeando las mascotas, nos indican que estamos la primavera y que por fin el béisbol de las Ligas Mayores se despierta tras de una larga hibernación. Play ball!