PERSPECTIVAS
Revolución de los Padres, un proyecto duradero o fiasco
SAN DIEGO FUE EL EQUIPO MÁS ACTIVO DURANTE EL PERÍODO DE RECESO EN GL
“Es una estrella de rock”. Así describió Matt Kemp a A.J. Preller, el gerente general de los Padres de San Diego que asumió el cargo en agosto y revolucionó el roster de un equipo cuya última participación en una postemporada se remonta a 2006. Los Marlins de Miami son el otro equipo de la Liga Nacional que lleva más tiempo sin hacerlo. Para sintetizar, durante una tanda de canjes en diciembre, Preller adquirió a tres nuevos jardineros sin desprenderse del trío predecesor. Aparte de Kemp, los otros dos fueron Justin Upton y Wil Myers. Y a una semana del arranque de los entrenamientos de pretemporada, los Padres sumaron al abridor James Shields al atarlo con un contrato de 75 millones de dólares por cuatro años, el más cuantioso que otorgan a un agente libre en la historia de la franquicia. “Al inicio del receso, seguía atento las contrataciones que A.J. estaba haciendo. Es increíble, todos los cambios”, indicó Shields en su presentación. “Los equipos con los que podía firmar tienen la ambición de ganar y hacerlo ahora. Es lo que me gustó de San Diego y sus dueños tienen esa mentalidad de ir con todo ahora. Y no sólo este año, sino en los próximos cuatro, cinco años”. Súbitamente, hay que anotar a los Padres en la lista de favoritos por el título de Oeste de la Liga Nacional, a la par de los Dodgers -un rival con una nómina que cuesta 250 millones de dólares-- y los Gigantes -- los campeones de la última Serie Mundial. Pero también pueden ser protagonistas de una secuela a la película de horror protagonizada por los Marlins en 2012, en la que acabaron en el último puesto del Este de la Liga Nacional tras causar sensación en el invierno previo con las adquisiciones de José Reyes, Mark Buehrle y Heath Bell. Los tres fueron transferidos a otros equipos en menos de un año. La pretemporada se pone en marcha el miércoles, con la llegada de los lanzadores y receptores a los campamentos en Arizona y Florida. Entre los jugadores en equipos distintos sobresalen Pablo Sandoval y Hanley Ramírez, ahora con los Medias Rojas de Boston. Los ases Jon Lester y Max Scherzer se incorporan a los Cachorros de Chicago y Nacionales de Washington, respectivamente. Nelson Cruz llega a Seattle para dar a los Marineros el bate derecho que complemente al zurdo Robinson Canó.
(+)EL TRABAJO DE PRELLEREl remozamiento de Preller, quien fue un scout en Latinoamérica, reflota a un equipo que en los últimos años parecía sumido en un absoluto anonimato. Kemp, Upton y Myers ofrecen un potencial intrigante. Kemp querrá pasarle factura a los Dodgers, su ex equipo, por cambiarle. Upton necesita impresionar al entrar a la agencia libre al final de la temporada. El mejor novato de la Liga Americana en 2013 con los Rays, Myers tratará de reivindicarse tras ser cambiado dos veces en los últimos dos años. Shields, quien ha cubierto por lo menos 200 innings en las últimas ocho temporadas, consolida una rotación que también incluye a Tyson Ross, Andrew Cashner e Ian Kennedy. Pero también hay otros factores podrían conspirar en contra de los Padres, como un cuadro interior demasiado frágil y el que se cuestione las garantías defensivas de sus tres nuevos jardineros en su espacioso estadio.