Conversiones exitosas

El tema de los problemas que enfrentó Alexi Ogando para llegar a las Grandes Ligas ha sido ampliamente divulgado en los últimos meses: Visa de trabajo denegada en 2005 por la admisión de Ogando de que participó en una red de trata de personas junto a otros jugadores y consecuentemente un exilio de cinco años para el joven dominicano, quien tuvo que limitarse durante ese largo período a lanzar en la Liga de Verano local y brevemente en el béisbol invernal. El año pasado, los Vigilantes solicitaron una vez más la visa de trabajo para Ogando y su compañero Omar Beltré. En esta oportunidad, el proceso fue exitoso y los dominicanos pudieron reanudar sus carreras. El resto, como dicen, es historia. Lo que no ha sido tratado con tanta frecuencia es que, con el espigado lanzallamas de Texas, se ha dado otro caso de conversión exitosa de jugador de posición a lanzador, fenómeno bastante frecuente entre prospectos dominicanos en los últimos años. Ogando era un jardinero con brazo de cañón que contaba con tres años de experiencia de liga menor en la organización de los Atléticos de Oakland. Cuando los Vigilantes lo escogieron en la fase Doble A del Draft Regla 5 de 2005, ya tenían el plan definido de convertirlo a lanzador. Seis años más tarde, Ogando ha iniciado la temporada como parte de la rotación del conjunto. Revisemos ahora otros dominicanos que lograron conversiones exitosas. Carlos MármolMármol ha sido un relevista dominante para los Cubs de Chicago, como lo demuestra el hecho de que ha promediado 13 ponches por cada nueve entradas en las tres últimas temporadas. A pesar de su tendencia a descontrol, es uno de los principales cerradores de la Liga Nacional. Curiosamente, jugó como catcher y jardinero en sus dos primeros años profesionales antes de trasladarse a la lomita en 2003. Félix RodríguezIgualmente firmado como receptor, Rodríguez jugó un par de años de liga menor en esa posición y su debut con el uniforme de los Tigres del Licey se produjo en esas funciones. Su conversión se produjo en 1993 y dos años más tarde estaba en Grandes Ligas. En su apogeo, fue un importante relevista de los Gigantes de San Francisco, principal preparador del cerrador de ese momento Robb Nen. Ambos fueron fundamentales para llevar a los Gigantes a la Serie Mundial en 2002. En la Liga Dominicana, fue stopper de los Tigres por varios años y pieza clave de la corona de 2002. Todavía es miembro activo del equipo azul. Rafael SorianoSoriano jugó un par de años en los jardines y primera base, antes de que su bate débil y poderoso brazo provocaran un cambio de dirección de los Marineros de Seattle. En Ligas Menores fue principalmente abridor, acumulando las entradas y experiencia para luego ser un relevista imponente en Grandes Ligas. Ha logrado superar serias lesiones en su brazo para sumar excelentes números en las dos últimas temporadas con Atlanta y Tampa Bay respectivamente. En la actualidad, es el preparador de Mariano Riveras con los Yankees. Guillermo MotaEl de Mota fue un cambio relativamente tardío, luego de desempeñarse por cuatro años como infielder en la organización de los Mets de New York. La conversión fue realizada en la organización de los Expos de Montreal, permitiéndole a Mota una larga carrera aún vigente de más de 13 temporadas y casi 700 salidas como relevista de siete organizaciones. Su mejor momento fue como preparador de Eric Gagne en el equipo de los Dodgers de Los Angeles. Jorge SosaCuando Sosa era un jardinero en la organización de los Rockies de Colorado, sus compañeros se sentaban a verlo tirar desde el outfield en las prácticas pre-juego. Con un brazo de esas condiciones y un promedio de liga menor de .208 en cuatro temporadas, era cuestión de tiempo para que alguna organización lo evaluara como lanzador. Los Marineros de Seattle comenzaron la transformación en 2001, y un año después Sosa estaba en Grandes Ligas con los entonces Devil Rays de Tampa Bay. El dominicano tuvo su mejor momento con los Bravos de Atlanta en 2005 (marca de 13-3, 2.55) y logró permanencia de casi una década en Grandes Ligas. En la Liga Dominicana, ha sido cerrador y principal abridor del Licey en diferentes etapas de su carrera, clara muestra de su versatilidad. Joel PeraltaFirmado como infielder por los Atléticos de Oakland en 1996, dado de baja sin haber viajado a los Estados Unidos y luego reclutado como lanzador por los Serafines de Anaheim en el 98. En la Liga Dominicana, ha sido uno de los principales relevistas del circuito en el pasado reciente. Ha tenido altas y bajas en su carrera de Grandes Ligas y actualmente es parte del bullpen de los Rays de Tampa Bay. Lanzador de probadas agallas, Peralta se caracteriza por su excelente comando de cuatro lanzamientos.