LA CRÓNICA DE LOS MARTES
Milcíades Olivo falleció el pasado viernes
EL 23.12.1964 EL SOBRINO DE GUAYUBÍN Y CHICHÍ DERROTÓ A JUAN MARICHAL 1 X 0 EN DOCE ENTRADAS
Recibimos la triste noticia de la defunción el pasado 15 de abril del ex lanzador derecho Milcíades Olivo, sobrino de los inmortales Guayubín y Chichí. De este noroestano, es recordado mayormente por lo que sucedió en aquella noche del miércoles 23 de diciembre de 1964, cuando se jugaba el campeonato profesional de 1964-1965. Un hit detrás del campo corto con dos corredores a bordo, tras un error del jardinero derecho, puso fin a un extraordinario duelo entre Milcíades Olivo y Juan Marichal, donde Olivo con los Tigres del Licey se impusieron a los Leones del Escogido 1 por cero, en doce largas entradas. El receptor Richert Booker, convertido en uno de los héroes, conectó un bombo que se convirtió en hit y Ray Barker anotó desde segunda con la carrera que dio la victoria a los azules ante una asistencia récord de 19, 396 fanáticos que se congregaron en el estadio Quisqueya para presenciar lo que ocurrió en aquel partido nocturno. El novato de entonces, Milcíades Olivo, realizó una brillantísima labor monticular, a pesar de aceptar una docena de indiscutibles, para superar al bigleaguer criollo Juan Marichal, después de este haber ganado 21 juegos en el pennant de Grandes Ligas de 1964. Sólo ocho inatrapables permitió Marichal a los felinos, pero no pudo impedir la vuelta del triunfo. Richert Booker y Dick Kenworthy fueron los mejores bateadores del Licey con dos sencillos cada uno. Juan Marichal con Federico Velásquez por el Escogido. Milcíades Olivo con Richert Booker por el Licey. Ganó Olivo y perdió Marichal. Seguiremos recordando a Milcíades, en especial por aquel duelo con el “Monstruo de Laguna Verde” y por tener suficientes condiciones como serpentinero, pero siempre fue acompañado de la mala suerte. Lo demuestra su récord de ganados y perdidos (27-35), frente al de efectividad (3.29). A su favor poseía el control legendario de sus famosos tíos. Guín Moya Existen deportistas que llenaron un gran cometido y han sido olvidados a pesar de sus hechos. Es penoso saber que ya no se menciona lo que representó para el deporte dominicano la figura del vegano Guín Moya. Este hijo de la Ciudad Olímpica ha sido uno de los más sobresalientes propulsores, con énfasis en el volibol. En su amplia carrera, recordamos los años en que ocupó la posición de Presidente de la Federación Dominicana de Volibol. También Vice-Presidente del Comité Olímpico Dominicano. Además sirvió como Delegado en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Jamaica 1962, cuando nuestro equipo de volibol femenino logró medalla de oro y los hombres obtuvieron presea de plata. Guín fue Presidente de Honor del XIX Ceremonial del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano (1985) y electo en su lar nativo inmortal en el festival de 1992. Sirva este segmento como un reconocimiento a Guín, por todo el beneficio que ha ofrecido al deporte nacional en sus muchas acciones efectuadas en aquellos años de plena actividad. Noticias varias Un pitcher panameño, que en su país alcanzó 24 victorias consecutivas en el campeonato nacional, y quien recetara 1,030 ponches, dejó de existir a los 50 años, a consecuencia de un cáncer de esófago. El beisbolista aludido es Roberto Hernández. ****** El Club Deportivo Naco designó con el nombre de Chito Asmar a la Casa Club del Proyecto Naco Golf & Country Club. Muy buena decisión de parte de la directiva que preside Toñito Alma, pues el amigo Chito es el hombre que ha realizado todas las construcciones que en los últimos 20 años muestra esa entidad social y deportiva. ****** Tenemos en nuestro poder el último libro de Luis Mena García, con el título de “100 años del Hipismo Dominicano”, una publicación que trata sobre las más importantes estadísticas hípicas dominicanas, una especie de sobredosis de información, que todo amante del hipismo debe tener consigo. ****** No lo hemos podido leer todavía, es el ejemplar “OCOA, veinte años de vivencias 1940-1960”, escrito por nuestro afectuoso amigo Marcos Soto, quien fuere un excelente lanzador aficionado, con experiencia internacional. Marcos, gracias por tu gentileza. Dentro de poco, sabremos mucho de Ocoa. ****** Los periódicos “Hoy” y “Diario Libre” publicaron en sus respectivas efemérides de esos matutinos, que el 14 de abril era nuestro cumpleaños, error que involucró fuere felicitado por muchos amigos y allegados. Lamentamos esta situación que no fue creada por nosotros. Lo verdadero es que nacimos a las once y treinta de la noche del día 24 de diciembre (Nochebuena de 1929).

