Unidad nacional frente a la crisis haitiana
Por primera vez en la historia democrática dominicana, un presidente en ejercicio y tres expresidentes se han sentado a dialogar, no para dirimir diferencias políticas, sino para construir consensos en torno a uno de los mayores desafíos que enfrenta la nación.
Se trata del abordaje conjunto y con espíritu de compromiso de la crisis haitiana y sus efectos en la seguridad, la economía y la estabilidad de nuestro país.
El encuentro entre Luis Abinader, Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina trasciende lo protocolar.
Es un acto de madurez institucional que demuestra que, cuando los intereses nacionales están en juego, las divergencias partidistas deben ceder ante el deber patriótico.
La creación de espacios de trabajo conjunto, la convocatoria al Consejo Económico y Social (CES) y el compromiso con una política exterior unificada son pasos necesarios para enfrentar una crisis que no puede resolverse con medidas aisladas.
La República Dominicana no puede -ni debe- cargar sola con el peso del colapso haitiano, pero sí debe actuar con firmeza y unidad para proteger sus fronteras, su economía y su orden interno.
Es significativo que este diálogo haya incluido el respaldo a la aplicación rigurosa de la ley migratoria, sin descuidar el respeto a los derechos humanos, así como el impulso a un desarrollo integral en las provincias fronterizas.
La comunidad internacional debe entender que, sin una solución real y sostenible en Haití -con apoyo multilateral-, la inestabilidad regional seguirá creciendo.
El Listín Diario valora este ejercicio de unidad y llama a todos los sectores a sumarse a este esfuerzo.
Cuando el país habla con una sola voz, su reclamo es más fuerte.
Que este sea el primer capítulo de una política de Estado, no un simple episodio de concordia pasajera.
La historia los juzgará por lo que hagan a partir de este momento.
