A un año de la transformación

Este 11 de marzo el Listín Diario cumple un año de haber emprendido un radical proceso de transformaciones para adecuarse a los nuevos modelos del periodismo que impone la era de las multiplataformas mediáticas.

Redujimos nuestro tamaño standard por un cómodo prototipo de tabloide, no como un simple recurso cosmético y superficial de cambio, sino como el preludio de un concepto de fondo que apuesta a una diferenciación de contenido, que es el camino que hoy están trillando las más acreditadas cabeceras impresas del mundo.

Se trata de un salto cualitativo dirigido a privilegiar las narrativas, investigaciones y análisis que completan o ayudan a entender un acontecimiento relevante, bajo un formato de piezas de texto e ilustraciones que facilitan la lectura y comprensión de los hechos, con un criterio más ajustado a la nueva cultura de lectoría que ha nacido en la era digital.

El cambio no solo se limitó a un rediseño del impreso en términos de forma y fondo sino que fue complementado con una reestructuración de las dinámicas internas de la Redacción integrada, de modo que la plataforma digital se enriqueciera con contenidos de calidad y al mismo tiempo se posicionara como lo que es hoy, el principal sitio web de la República Dominicana.

Ha sido un proceso simultáneo que ha impactado las dos plataformas, diferenciándolas en sus objetivos de público, pero con un mismo horizonte: el de informar con apego a la verdad y la realidad. En lo digital nos esmeramos con informar a tiempo y con diversidad de formas de contar la noticia, aprovechando los recursos que la tecnología pone a nuestro alcance y diseminándolos por las redes sociales.

Conscientes, como ya he planteado en anteriores Reflexiones, de que los diarios impresos no están para dar las noticias primero, sino para contextualizarlas, analizarlas e interpretarlas, el Listín Diario apuesta a un periodismo de soluciones, en el impreso, y se adapta al “periodismo de las interrupciones” que los usuarios del móvil, que hoy constituye el grueso de la audiencia moderna, prefieren rutinariamente.

Dejar atrás el “Síndrome del legado”, es decir, de las antiguas formas de ofrecer las noticias, una atadura de la cual algunos diarios tradicionales del mundo no han podido desprenderse, ha requerido tiempo para la adaptación de las distintas generaciones que confluyen en la Redacción integrada, pero avanzamos confiados, sin miedo a los cambios.

Al año de poner en marcha estos procesos nos sentimos más que entusiasmados para seguir pisando el acelerador del cambio, en correspondencia con lo que demandan hoy nuestros lectores y usuarios y con lo que ha sido la tradición innovadora que le ha permitido al Listín Diario vivir 130 años en el corazón de todos los dominicanos.