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Hay que poner fin a esa burla de la ley

La resolución del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) que obliga a que todos los conductores que dejan vencer la licencia de conducir, al momento de renovarla tengan que pagar todos los años pendientes, puede contribuir a poner orden en el porte de este documento que autoriza a manejar vehículos en la vía pública.

La decisión, al amparo de la Ley 63-17 de Movilidad, Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial de la República Dominicana, ya está moviendo a cientos de conductores a ponerse al día aunque para ello han tenido que pagar varias veces los RD$890 que cuesta la renovación ordinaria.

Lo que han descubierto los ofi ciales del Intrant es que hay conductores con hasta 15 años manejando vehículos con la licencia vencida, pero esta vez han tenido que someterse a una inducción que cuesta RD$550 y pagar montos que alcanzan hasta los RD$15,000 para poder renovar el documento.

A sabiendas de que no hay forma de evadir la disposición, a los conductores morosos no les ha quedado más alternativa de reunir el efectivo y renovar el documento, que ahora tiene una nueva complicación: para actualizar la licencia los choferes no pueden tener multas pendientes de pago.

Pagar las multas pendientes, mas el cúmulo de años sin renovar, está provocando espanto porque la suma no siempre está al alcance de quienes ignoraron el cumplimiento de la ley en el momento indicado.

Este brinco a comienzos de año está demostrando que cuando la autoridad pone orden para cumplir y hacer cumplir la ley, los incumplidores dejan de burlarse de los ciudadanos correctos que cumplen fi elmente sus obligaciones tributarias de todo tipo.

Que se hagan cumplir las leyes para que los ciudadanos entiendan estas como obligaciones para todos por igual, no una tabla de sugerencias para que las cumplan quienes quieran.

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