Un elemento desnaturalizador del Mirador Sur
Ha llamado la atención, entre los visitantes y los vecinos del Mirador Sur, la existencia de una planta trituradora de ramas y troncos que el Ayuntamiento del Distrito Nacional ha instalado allí para producir abono orgánico. Lo que asombra es el área que ha sido desmontada para que pueda añadirse a ese proyecto de compostaje una máquina trituradora a las tres que ya existen, con capacidad para moler hasta diez toneladas de materia vegetal. Es, a todas luces, un enclave un tanto raro e inapropiado para un parque que está llamado a ser zona libre de ruidos para el paseo, el descanso, la ejercitación y la sana diversión de los ciudadanos, que se agrega al elemento desnaturalizador que constituye la existencia de carpas tipo campamento militar para albergar a patrullas de vigilancia. El Ayuntamiento explica que al instalar esas máquinas trituradoras en el mismo seno del parque Mirador Sur “se ahorran costos de operación al prescindir de transportar las ramas y los troncos al relleno sanitario de Duquesa”, pero entendemos que el cabildo debe tener otros terrenos o solares disponibles para este tipo de instalaciones. Mas allá de las razones que pueda argüir el Ayuntamiento, es evidente que instalaciones de este género no caben en este parque, sino en otro lugar donde el movimiento de ramas y troncos y el proceso mismo de encender máquinas trituradoras y de acopiar y distribuir el abono orgánico no constituyan elementos que afecten el perfi l de zona exclusiva para la recreación y el esparcimiento ciudadano. Es mejor poner remedio a tiempo a la expansión de este proyecto de compostaje antes de que, basados en los mismos argumentos que ahora expone el cabildo, otras autoridades, en el futuro, se hagan de la vista gorda y provoquen más distorsiones y atentados contra este vital espacio público de nuestra capital.