El mejor premio a la perseverancia
Luchando y sacrificándose de muchas maneras para no perder clases en este nuevo año escolar, cerca de 900 niños y adolescentes que pertenecen a la escuela pública Los Corales, de Santo Domingo Este, han dado un gran ejemplo de su voluntad por aprender para ser útiles a su sociedad. Todos los días se llevaban sillas de sus hogares y se ubicaban en marquesinas, carpas o viviendas prestadas para recibir clases en tales circunstancias, sin amilanarse ante la dificultad de no contar con un ambiente más adecuado para la docencia. La historia de su sacrificio viene del 2007, cuando una generosa dama cedió durante tres años la segunda planta de su vivienda para que los primeros alumnos de la escuela se educaran. Los maestros disponibles trabajaron sin cobrar dos años, hasta que fueron nombrados por el Gobierno. Luego, en la medida en que fue creciendo la matrícula, el dueño de un colegio católico cedió su local en horas de la tarde, para que los 900 estudiantes de los niveles básico y medio tuvieran allí el espacio adecuado. El propietario sólo quería que Educación le nombrara diez profesores o que le comprara el local. Ni uno ni lo otro. Al tomar la decisión de suspender el albergue de los estudiantes, estos tuvieron que tirarse prácticamente a la calle e ingeniárselas para proseguir las clases en cualquier lugar, lo que implicaba muchos inconvenientes que solo el deseo de aprender ayudó a enfrentar y superar. LISTÍN DIARIO se hizo eco de esta situación, publicó varios reportajes sobre esta formidable prueba de interés por los estudios. Y ya la escuela tiene un local provisional, de doce aulas, que le construyó en apenas dos meses el Ministerio de Educación, hasta que se edifique el definitivo. Este es el mejor premio a la perseverancia y a la capacidad de sacrificio de estos jóvenes del barrio La Caña, del Almirante, que no desertaron de la escuela ni se echaron a esperar que el Gobierno se decidiera por cambiarles su suerte, sino que continuaron con fe y decisión el propósito de formarse para ser mejores y más útiles ciudadanos en el futuro.
