La economía política

Recuerdo un comentario que una vez me hiciera hace años un secretario de Hacienda (hoy es Ministerio) en respuesta a una interrogante respecto al informe positivo que él estaba ofreciendo en momentos en los que el país atravesaba una difícil situación por el impacto de los altos precios del petróleo y sus derivados en el comercio internacional.

Me dijo: te pongo un solo ejemplo: si vas a vender alguna mercancía ¿vas a decir que no sirve?, si haces eso nadie te la va a comprar. Ambos nos reímos, porque al final es así, pero seguí insistiendo y puse como ejemplo que si vendía mis zapatos usados y decía que estaban intactos, pero tenían las suelas un poco gastadas estaría mintiendo y ni eso era ético, pero tampoco justo y perdería toda credibilidad.

¿Qué respuesta cree que obtuve?...tienes toda la razón porque lo último que se puede perder es la credibilidad. Ahora, no estarías mintiendo si lo dices al final, porque no estarías dejando de decirlo. Pero tampoco dejarías pasar la oportunidad de hacer negocio mostrando los atributos y la calidad, la fortaleza que, hoy llaman “resiliencia”, y que justificarían la compra por el precio-calidad y la ventaja de que las suelas gastadas pudieran ser repuestas sin la más mínima dificultad. No te digo que te inhibas.

Y, siguió: Recuerda que en el caso de los zapatos ya venden “tapitas” para cualquier calzado y solo debes decir dónde conseguirlas o que puedes financiarlos para en un tiempo prudente pueda reponerlas. Seguido comprarían esos zapatos, me dijo.

Así es la economía de un país, de una empresa, o de una familia, es un fundamento que va más allá de las enseñanzas primarias de manejar (administrar) y distribuir un bien escaso, sea dinero o mercancías u otros activos.

Aunque la anécdota, tiene como base mostrar la parte “política”, “la salida a una situación”, que hay que cuidar cada día sin ningún tipo de censura en estos momentos tan delicados que vive el mundo con la pandemia del coronavirus Covid-19, la cordura y el discernimiento de la fuerte competencia global por los mercados alguna enseñanza habrá de dejar, respecto de la economía política, más que de la política económica.